La agenda de desarrollo de la ONU busca la ayuda de las empresas

2015 es un año clave para asegurar el futuro de la cooperación y la ayuda al desarrollo sostenible. El calendario de la ONU, a través del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), está plagado de eventos para fortificar sus fondos y metas: en julio se celebra la tercera conferencia sobre financiación al desarrollo en Addis Abeba (Etiopía), en diciembre París organiza la nueva cumbre del Cambio Climático y en septiembre se aprobará el nuevo fondo de objetivos de desarrollo sostenible, mecanismo que ha presentado este jueves el PNUD a las empresas privadas españolas, a través de la fundación de empresas responsables SERES.

Este nuevo plan de cooperación responsable, con una contribución del gobierno de España, tiene como fin cumplir los 17 objetivos globales de desarrollo sostenible acordados entre los 194 países de la ONU. La administradora asociada del PNUD Gina Casar ha repasado este jueves en la sede de SERES en Madrid esta agenda para el desarrollo post-2015, que se apoyará esta vez en la colaboración público-privada.

La representante de Naciones Unidas ha llegado a España para pedir al centenar empresas sostenibles asociadas a la fundación, entre las que se encuentra PRISA, su ayuda en el plan: "Necesitamos nuevos objetivos y actores que ayuden. El sector privado se encarga del 90% del flujo de capital y del empleo". Aunque ha reconocido, sin embargo, que los fondos del plan no tiene una cantidad concreta asignada: "Es imposible financiar al completo. Los objetivos deben lograrse a través de políticas públicas".

La justicia, la prosperidad y la dignidad de las personas en las empresas y países participantes son algunos de los abstractos que busca la agenda sostenible, que concreta sus esfuerzos, por ejemplo, en el empoderamiento de la mujer, la seguridad alimentaria, los sistemas de saneamiento de agua, los vinculos entre lo social y global, la creación de las oportunidades laborales o la erradicación de la pobreza y de la desigualdad. Ir más allá de los Objetivos del Milenio, con "experiencias concretas que ayuden a conseguir un mundo sostenible e inclusivo".

"La responsabilidad social tiene que estar en el ADN de las empresas, pese a la volatilidad de la crisis", ha pedido Casar. El vicepresidente primero de SERES, Francisco Román, ha recordado que la fundación encargada de defender el papel social de las empresas se fundó precisamente en el epicentro de la crisis, en 2010: "En estos años hemos aprendido a quedarnos con los fundamentos. Hay que tener objetivos a largo plazo y crear un valor compartido".