El Gobierno apoya la propuesta andaluza

El establecimiento de una tasa plana para el reparto de las ayudas agrícolas a partir de 2014 parece el principal escollo con el que se va encontrar la ministra Rosa Aguilar para alcanzar una posición conjunta de España en la negociación de la futura PAC. De momento, la titular de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino avaló ayer la propuesta andaluza de oponerse a una ayuda homogénea por territorios, que ya no tendrá en cuenta los derechos históricos. "No estamos dispuestos a dar ni un paso atrás en la nueva PAC", declaró en Bruselas Aguilar, que también considera "insuficiente" la ficha financiera asignada a España y el modelo elegido para la regionalización de las ayudas.

La tasa plana para las ayudas directas que rechaza Andalucía sí que gusta, sin embargo, en Castilla y León, que es la segunda comunidad que más fondos recibe, por encima de los 900 millones. La organización agraria Asaja en esa comunidad dijo al conocerse las primeras filtraciones del documento que apoyaban una ayuda mínima si no había recortes de fondos, y la Junta de Castilla y León valoró en mayo como "positiva" la intención de Bruselas. Aunque los ganaderos castellano-leoneses sí rechazan la tasa plana.

Pero las discrepancias entre agricultores de distintos territorios podrían disiparse con un acuerdo político. El pasado 30 de junio, PSOE y PP consensuaron en el Congreso una resolución en la que se fijan las líneas maestras de la posición que defenderá España en este proceso de negociación, en consonancia con lo acordado en la Comisión Mixta Congreso-Senado creada a tal efecto. El documento deberá recibir el visto bueno del Parlamento Europeo, con mayoría del PP.

Rosa Aguilar dijo que tan pronto se conozca el documento oficial del comisario de Agricultura se celebrará "una reunión urgente" con las comunidades autónomas y las organizaciones agrarias para tener una "posición española fuerte" y luchar por los recursos que ahora recibe España, más de 7.000 millones de euros. Además, la ministra pretende establecer una alianza con Francia, Alemania e Italia en defensa de unos objetivos comunes.

Por lo que respecta a Andalucía, la Junta y el sector suscribieron en marzo un documento que aboga por establecer criterios de diferenciación que permitan reflejar las distintas realidades existentes en la agricultura y ganadería, tanto de la UE como de España, y rechaza el establecimiento de una tasa plana por Estado miembro o región.