A Coruña eleva la edificabilidad junto al parque de Eirís

El pleno del Ayuntamiento de A Coruña dio luz verde ayer a la construcción de tres nuevas promociones urbanísticas con modificaciones que, para parte de la oposición municipal, solo benefician a los promotores privados al darles mayor aprovechamiento.

Duras críticas le valió ayer al gobierno local de Carlos Negreira (PP) aprobar en solitario la modificación del proyecto de construcción de ocho edificios en vez de los cuatro inicialmente previstos en el parque de Eirís. Ni siquiera los socialistas, que iniciaron este expediente en el pasado mandato estando al frente del departamento de Urbanismo, apoyaron al PP para la aprobación definitiva de esa urbanización que cuenta también con el fuerte rechazo de los vecinos. La modificación del proyecto acarreará, con estos ocho "mamotretos", en palabras del BNG, un fuerte impacto paisajístico ya que tapará parte de las vistas sobre la costa de A Coruña. Incluso la portavoz socialista, Mar Barcón, tachó de "muy agresiva" esta promoción urbanística que, según aseguró, no consiguió tener los informes favorables imprescindibles hasta que el PP se hizo en junio pasado con el bastón de mando del Ayuntamiento.

El informe técnico favorable definitivo del departamento de Urbanismo tiene fecha del 30 de junio, indicó Barcón al explicar por qué su grupo votó ayer en contra del proyecto que él mismo empezó a tramitar estando en el Gobierno local. El PP acusó de incoherencia a los ediles socialistas y asegura, en contra de la versión de la oposición, que se limitó a llevar a pleno la aprobación definitiva de los tres proyectos "sin modificar ni una sola coma".

"Beneficiar" a Fontenla

Los socialistas sí votaron con el PP la aprobación definitiva para la construcción de dos torres de viviendas de protección oficial en Someso, en las inmediaciones del recinto ferial de A Coruña. Para el Bloque y Esquerda Unida, estos dos proyectos, al igual que el de Eirís, se modificaron solo para beneficiar a los promotores privados. Sobre todo, según denunció el nacionalista Xosé Manuel Carril, al presidente de la patronal gallega, Antonio Fontenla, que es uno de los cuatro promotores de esa urbanización. En la parcela propiedad de su empresa Canovan Patrimonios, SL, podrá construir 17 viviendas más de las inicialmente previstas. "La modificación del proyecto no tiene la más mínima justificación de interés pública", acusó Carril.