AENA espera luz verde para negociar ya con los controladores

AENA espera la luz verde de los servicios jurídicos del Estado para retomar "cuanto antes" la negociación del convenio colectivo con el sindicato de controladores USCA. Una portavoz de la empresa pública que gestiona los aeropuertos explicó ayer que se está analizando la posibilidad legal de volver a la mesa de negociación, en suspenso tras la declaración del estado de alarma y la militarización de esos profesionales. De momento, dijo, "no hay una conclusión". Sus dudas estriban en saber si se puede retomar el diálogo entre empresa y controladores cuando estos dependen, al menos hasta el 15 de enero, del Estado Mayor del Ejército del Aire.

El Gobierno, sin embargo, sí parece tener claro que no hay inconveniente en volver a sentarse con el sindicato, ya que según indicó ayer en el Congreso el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, los controladores mantienen sus derechos "intactos", incluidos el de libertad sindical, negociación colectiva y libertad de expresión. La misma opinión que tienen al respecto los más relevantes cargos del Ministerio de Justicia.

Las principales divergencias en los planteamientos de las partes se refieren a la jornada laboral y las retribuciones de los controladores en situación de reserva o de licencia retribuida. USCA quiere que todos los que están en esa situación cobren el complemento de adaptación a la nueva jornada, mientras la empresa pretende que sea el 50%.

AENA propone mantener las 1.670 horas (de actividad aeronáutica) con la posibilidad de establecer cuatro niveles (entre 1.200 y 1.500 horas) según las dependencias, si bien exige que si es necesario trabajar más se paguen las horas como ordinarias. USCA, por su parte, pretende que se parta de la situación actual pero para rebajar la actividad dentro de dos años a 1.440 horas, que consideran superior a la media europea.

El sindicato entregó ayer en el Congreso una carta a los grupos parlamentarios en la que comunican su "voluntad de continuar sus labores de mediación ante el colectivo profesional de controladores aéreos" para resolver el conflicto laboral. Asimismo, USCA afirma que ha "conseguido" que el 85% de los controladores operativos firmen una carta en la que se comprometen a garantizar el servicio, lo que a su juicio "invalida per se el estado de alarma".