Interior tramita el asilo del africano albino que huye de los brujos

La Oficina de Asilo y Refugio del Ministerio del Interior ha admitido a trámite "en tiempo récord" la solicitud de asilo cursada con carácter de urgencia por los letrados de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) en Canarias en nombre de Moszy, el inmigrante negro albino que dice ser oriundo de Benín y que llegó a Tenerife en cayuco hace dos semanas.

El joven, de apenas 18 años, pidió a los agentes de la Brigada de Extranjería que no le devolvieran a su país, porque su vida correría peligro. Les contó que con toda probabilidad sería víctima de uno de los muchos rituales de brujería que se celebran en algunas zonas del continente, donde los albinos sufren el rechazo de su familia y vecinos, ya que son considerados enviados del mal. Sin embargo, si mueren en un ritual, las partes de su cuerpo se convierten en amuletos de la buena suerte o conjuros contra la fatalidad. Esto ha provocado que muchos de ellos sean literalmente cazados por grupos de traficantes, que los descuartizan y luego venden los trozos de sus cuerpos por cantidades que superan su peso en oro.

El director gerente de CEAR en las islas, Juan Carlos Lorenzo, ha confirmado que el Ministerio del Interior ha admitido a trámite, "con una celeridad pasmosa", la solicitud de asilo de Moszy. Lorenzo hizo un llamamiento a la opinión pública para que dejara de tratar al joven como un fenómeno mediático, en vez de como a la persona que es.