Navegantes temerarios

"¿Alguna vez vuestros padres os han explicado cómo navegar o cómo se hace una página web?". Esta es una de las preguntas que recoge el estudio Nuevas Tecnologías e Infancia y Adolescencia 2008, realizado por el Observatorio de la Infancia en Andalucía con menores de entre 9 y 17 años. Las respuestas desvelan que la mayoría recibe pocos consejos de sus padres para adentrarse en la Red: "No, yo los supero a ellos en eso". "No porque mis padres no saben de ordenador". "No, que yo sé más de ellos de esto".

Hoy se celebra el Día Internacional de Internet Seguro y el estudio elaborado entre niños y jóvenes andaluces demuestra que son poco conscientes de los peligros a los que se exponen a través de la Red. La mayoría considera que el uso de Internet tiene un componente de suerte: puede tocarte o no. Y muchos coinciden en que el único consejo que reciben de sus padres es no hablar por la Red con desconocidos. Aún así, casi todos reconocen haber contactado a través de programas de chat como Messenger con personas que no conocían.

Para intentar estrechar la brecha generacional entre padres e hijos, la consejería de Innovación ha editado la guía Educar para proteger, que ofrece a los progenitores consejos e información sobre la tecnología que usan sus hijos y que a ellos se les escapa de las manos. La guía está disponible desde hace unas semanas en kiddia.org, una web lanzada recientemente por el gobierno andaluz para enseñar a los menores de 11 años a navegar de forma segura y divertida. En las próximas semanas se pondrá en marcha otra página diseñada para los adolescentes (de 12 a 17 años).

Andalucía es, además, la única comunidad que ofrece de forma gratuita filtros de contenidos para que los progenitores restrinjan el acceso de sus hijos a determinadas páginas. Aunque ya se la han descargado casi 4.500 padres, todavía son una minoría. Según la última encuesta del Observatorio de la Infancia, el 84,8% de los padres ha controlado el acceso de los menores a determinados contenidos, aunque este control suele reducirse al horario de uso y el historial de navegación. Sólo tres de cada 10 padres utiliza algún programa para filtrar los sitios web accesibles a sus hijos.