Un nieto de Franco, a juicio por maltrato

Jaime Martínez-Bordiú, nieto menor del general Franco, se sentará en el banquillo de los acusados el próximo día 26 para ser juzgado por violencia machista. La fiscalía de Barcelona solicita para él penas que suman cuatro años y nueve meses de cárcel por los presuntos delitos de coacciones, malos tratos y amenazas a su novia, Ruth Martínez.

La mujer retiró la denuncia que presentó en su día, pero eso no impide que el caso siga su tramitación por la actuación de oficio de la fiscalía, que reclama que durante tres años el hombre tenga prohibido acercarse a su novia a menos de mil metros.

Los hechos ocurrieron el 21 de agosto de 2007 en la habitación de un hotel de Mijas (Málaga) cuando, según el relato de la fiscalía, la pareja inició una discusión. La novia de Martínez-Bordiú intentó abandonar el hotel para regresar a Barcelona, donde reside, y fue entonces cuando el acusado la cogió por los brazos, la tiró sobre un sillón y la insultó, advirtiéndola de que compraría todos los billetes de avión disponibles para impedir su marcha. La fiscalía sigue relatando que Ruth Martínez cogió su maleta para marcharse y que el acusado se la tiró al suelo. Cuando ella intentó recoger sus enseres, el hombre propinó una patada a una silla, en la que había un ordenador portátil que salió despedido golpeándola en el costado izquierdo.

Su novia, ruth martínez, sufrió lesiones en los brazos y en un costado

La mujer salió de la habitación para solicitar un taxi y el número de la policía y él se fue tras ella con la intención de quitarle el bolso. No lo logró, pero la amenazó diciéndole: "Como hayas llamado a la policía te mato", en versión de la fiscalía. A consecuencia de los hechos, Ruth Martínez sufrió lesiones en los brazos y en el costado, que precisaron cinco días para curar. La mujer ha renunciado expresamente a cualquier indemnización.