Barcelona abrirá 10 pozos más de agua freática en tres años

El subsuelo de Barcelona puede dar más agua si se abren más pozos. La ciudad tiene actualmente 20 y los planes del Ayuntamiento de Barcelona pasan por ampliar la red a 30 en los tres años que restan de mandato. La segunda teniente de alcalde, Imma Mayol, señaló ayer que el subsuelo de la capital catalana puede dar hasta tres hectómetros cúbicos, cuando actualmente se aprovechan en torno a 1,5 hectómetros cúbicos y este año se quiere acabar alcanzando los dos hectómetros. La utilización del agua freática y la regenerada -la aprovechable tras el ciclo de la depuradora- para el riego de las zonas verdes y la limpieza de calles en Barcelona son dos de las mejores maneras de reducir, todavía más, el consumo de agua de boca. Además de disponer de más pozos, se trata de crear una red de conexión del agua que circula por el subsuelo barcelonés. Algo parecido a una red de anillos que sirva para abastecer de agua de riego y de limpieza a barrios enteros. En fase de obra está ya el anillo de agua freática de Glòries, Bac de Roda y el parque Central de Poblenou. Hasta ahora, la explotación de la red de agua freática es fundamentalmente pública -salvo algunas concesiones otorgadas por la Agencia Catalana del Agua-, pero otras instituciones -como el Puerto y los cementerios-, alguna comunidad de vecinos e industrias se han dirigido al consistorio pidiendo autorización para extraer agua de los pozos con camiones cuba. "En el caso de los privados, está por decidir", comentó Mayol. La edil se mostró optimista y dijo que está convencida de que no habrá restricciones de agua de boca en Barcelona.

14 alcaldes de ERC

La polémica en torno a las soluciones a la sequía, los defensores y detractores de los trasvases y la actuación de algunos responsables políticos no amaina. En Tarragona, la federación de ERC en las comarcas del Ebro y los 14 alcaldes con los que cuenta suscribieron ayer un manifiesto en el que exigen el cese del consejero de Medio Ambiente, Francesc Baltasar. Los republicanos pidieron su dimisión por "falta de planificación y por la ocultación de información, y también por la falta de diálogo y consenso con el territorio del Ebro", informa Oriol Aymí.

En Madrid, José Blanco, secretario de Organización del PSOE, aseguró que la opción del trasvase del Ródano, que defiende CiU, "está sobre la mesa", aunque matizó que es una solución que se debe estudiar porque hay que dar una respuesta "desde el sentido común". Y Juan Corominas, director de la Agencia de Agua Andaluza, defendió el traslado en barco de agua desde la desaladora de Carboneras (Almería) de forma "coyuntural".