Peneuvistas y socialistas sellan su pacto para las cuentas de Álava

El PSE y el PNV cerrarán hoy, con la presentación del acuerdo presupuestario alcanzado ayer, la brecha que no fueron capaces de saltar en julio para gobernar conjuntamente la Diputación de Álava y el Ayuntamiento de Vitoria. Los dos partidos han alargado la negociación hasta casi el último momento, ya que el plazo para presentar el proyecto presupuestario en las Juntas Generales termina el jueves.

Ambas formaciones han tenido que hacer de la necesidad virtud: el socialista Patxi Lazcoz cuenta con 9 concejales de 27 en el consistorio y el peneuvista Xabier Agirre sólo tiene el respaldo de 18 de los 51 miembros de la Cámara de control foral.

La negociación para el Ayuntamiento sigue pendiente, pero los grandes compromisos están adoptados. Los socialistas la consideran lo suficientemente encauzada como para adelantar sin desconfianza su respaldo a Agirre, pese a que todavía el grupo del PNV en el Ayuntamiento no haya explicitado el suyo a Lazcoz. "Estamos en fase de encaje técnico de propuestas del PNV, pero la relación es leal", dijeron fuentes del equipo de gobierno municipal.

El único acuerdo transversal que se va a producir en las instituciones forales y los grandes ayuntamientos va a darse, paradójicamente, entre el PNV más soberanista, que tiene en Álava una ejecutiva copada por los partidarios de Joseba Egibar, y el PSE menos vasquista de la comunidad autónoma, que ayer mismo selló en las Juntas Generales un acuerdo con el PP para desautorizar los planes y la consulta del lehendakari.

Prieto y Agirre, que compitieron en julio por el liderazgo de la Diputación, presentarán hoy el contenido del acuerdo y el consejo de diputados aprobará mañana el proyecto de norma en una reunión extraordinaria. La Diputación gestionará 547 millones de euros.