Pedrosa estalla

A cada carrera que pasa, Dani Pedrosa ve cómo el camino hacia su objetivo más deseado, el de convertirse en campeón del mundo de MotoGP, se hace más cuesta arriba. Ahora, cuando ocupa la posición más privilegiada del panorama motociclístico mundial -es el primer piloto del equipo más potente- la situación va camino de convertirse en trágica. Pedrosa, tercero en la general a 59 puntos de Stoner, ha aguantado mucho sin quejarse de una moto que flojea, tanto de motor como de esqueleto. Pero el drama que vivió en Donington Park -acabó octavo a 38 segundos del australiano-, le hizo estallar. Tanto que, cuando todo el mundo daba por segura su renovación con Honda, él se arrancó y dijo que, tal cómo pintan las cosas, prefiere no cerrarse la puerta de otros talleres. "Los resultados no son los esperados y la moto no rinde lo que debe. Lo que no puedo hacer es quedarme de brazos cruzados", dijo el piloto.

Acto seguido, un periodista le preguntó: "¿Significa eso que no cierra la puerta a escuchar a otros equipos?". Y el piloto respondió: "Tampoco hay que cerrar los ojos. Si hay opciones mucho mejores, lo que no voy a hacer es quedarme en un sitio que no es tan bueno". Y con una afirmación categórica, prosiguió: "No me imaginaba que en este equipo pudiéramos llegar a esta situación".

A pesar de la dureza de sus palabras, el piloto catalán, de 21 años, afirmó que no cesará en su empeño de exprimir el potencial de la moto, por más que no augura una gran mejora. "Desde la primera carrera no hemos avanzado mucho y no sé si lo haremos hasta el final".

A pesar de que arrancó el tercero y rodó líder las cuatro primeras vueltas, su monumental berrinche se fraguó antes de que los semáforos se apagaran. "Al completar la vuelta de formación, el embrague no funcionaba y he tenido que meterme en el box para cambiar de moto", explicó el tricampeón del mundo. "El cambio de marchas de la moto dos no tenía la misma configuración que el de la uno, ni tampoco los mismos neumáticos [llevaba blandos atrás]. A medida que la pista se ha ido secando, los demás han cogido ritmo y yo no he podido seguirles", se lamentó. "Ha sido un fallo del equipo", cercioró Pedrosa, muy molesto por haber cumplido con nota durante los entrenamientos y haberse aflojado en el momento clave.