Un grupo de sicarios asesina a un diputado local mexicano

Un diputado local del Estado mexicano de Nuevo León murió tiroteado ayer por unos sicarios, en lo que la policía considera un nuevo ajuste de cuentas entre mafias de narcotraficantes. El crimen se produjo en pleno centro de Monterrey, capital de ese Estado norteño e importante ciudad financiera. El diputado, Mario César Ríos, de 44 años, acababa de salir del Palacio Legislativo cuando su vehículo fue interceptado por un todoterreno, cuyos ocupantes abrieron fuego con armas de grueso calibre.

Según algunos testigos, hubo intercambio de disparos entre ambos vehículos. Malherido, Ríos fue trasladado a un hospital cercano, donde falleció minutos después. El diputado pertenecía al Partido Revolucionario Institucional (PRI) y su hermano había sido investigado por presuntos nexos con el narcotráfico. Se trata del asesinato número 80 en lo que va de año en esa ciudad. En todo el país, los crímenes vinculados a la delincuencia organizada se han cobrado más de 1.200 vidas.

El incremento de la violencia coincide con la intensa ofensiva contra el narco lanzada por el presidente mexicano, Felipe Calderón, que ha desplegado a miles de efectivos del Ejército por varios Estados, en un intento de minar el creciente poder de los carteles.