Comparece ante el juez el acusado de asesinar a cinco mujeres en Ipswich

Steven Wright, de 48 años, compareció ayer ante el juez en el tribunal de Ipswich, tras ser acusado el jueves por la noche por la policía del asesinato de cinco mujeres que ejercían la prostitución en la citada ciudad inglesa. Wright, que permanecerá en prisión hasta que vuelva a presentarse ante el juez el 2 de enero, se limitó ayer a confirmar sus datos de identidad asistido por un abogado. Un segundo sospechoso, Tom Stephens, de 37 años, ha sido puesto en libertad bajo fianza.

Camionero en los últimos tiempos, antes estibador en el puerto de Felixstowe y en su día propietario de un pub, Wright compareció tranquilo y vestido con traje y corbata para oír las acusaciones presentadas contra él por la policía: cinco cargos de asesinato por las muertes de Gemma Adams (de 25 años), Anneli Alderton (24), Tania Nicol (19), Paula Clennell (24) y Annette Nicholls (29). Todas ellas ejercían la prostitución en el llamado barrio rojo de Ipswich, muy cerca del domicilio de Steven Wright en London Road.

Los investigadores mantienen un absoluto bloqueo informativo sobre las razones que les han llevado a inculpar a este hombre de aspecto tranquilo, dos veces divorciado y que en los últimos tiempos vivía con Pamela, una mujer que comparte con él edad y apellido, aunque no están casados.

El bloqueo informativo se debe a que, de acuerdo con el sistema legal británico, la prensa no puede publicar nada que pueda afectar en un sentido o en otro un proceso judicial ya en marcha. Sólo se sabe que Wright era cliente habitual de muchas prostitutas, que no tiene fama entre ellas de ser especialmente violento o complicado como cliente y que solía llevar a las chicas a su propia casa aprovechando que su compañera trabaja en horario nocturno en un locutorio.

También se sabe que al ahora acusado le gusta jugar al golf un par de veces a la semana, que está bastante obsesionado con las apuestas y que siempre ha tenido fama de mujeriego. Pero no se sabe o no se puede publicar nada sobre el caso ni sobre antecedentes personales que puedan condicionar al jurado. Se cree que la policía ha encontrado numerosos rastros de ADN en los cuerpos de tres de las chicas asesinadas, probablemente en aquéllas cuyos cadáveres aparecieron en tierra y no sumergidas en el agua, como fue el caso de los cuerpos de Gemma Adams y Tania Nicol.