Exteriores avala las delegaciones de la Xunta en el extranjero

El Ministerio de Asuntos Exteriores da por buena la decisión de la Xunta de crear, a partir del año próximo, una red de delegaciones oficiales en el extranjero para institucionalizar la presencia de Galicia y sus intereses en el ámbito internacional. Fuentes del departamento que dirige Miguel Ángel Moratinos se mostraron confiadas en que la representación exterior de Galicia se mantenga dentro de los límites fijados por el Constitucional.

La disputa competencial entre el Gobierno central y las comunidades autónomas en torno a las actividades de estas últimas en el extranjero fue resuelta formalmente por el Tribunal Constitucional. Una sentencia de 1997 distingue entre la "política exterior", una competencia que corresponde ejercer en exclusiva al Gobierno central y la "acción exterior", que sí puede ser desarrollada por los Gobiernos autónomos.

La citada resolución, que es la base sobre la que la Xunta ha construido el decreto que regula la creación de sus delegaciones en el extranjero, es también la referencia que utiliza el Ministerio de Asuntos Exteriores para manifestar que no pondrá obstáculos a la iniciativa puesta en marcha por Galicia.

La jurisprudencia del Constitucional se basa en el reconocimiento de que las comunidades autónomas pueden realizar determinadas actividades "no ya sólo fuera de su territorio, sino incluso fuera de los límites territoriales de España" con el fin de llevar a cabo correctamente sus funciones.

A juicio del Alto Tribunal no pueden considerarse materia de relaciones internacionales, reservadas exclusivamente al Estado, "todo tipo de actividad con alcance o proyección exterior". Lo que los Gobiernos autónomos no podrán hacer, entre otras cosas, es concertar tratados con Estados soberanos y organizaciones internacionales gubernamentales. Del mismo modo, la jurisprudencia del Tribunal Constitucional prohíbe "establecer órganos permanentes de representación" ante países soberanos, así como llevar a cabo actividades que "originen obligaciones frente a poderes públicos extranjeros, incidan en la política exterior del Estado o generen responsabilidades frente a Estados extranjeros u organizaciones inter o supranacionales".

El marco de actuación exterior de las comunidades autónomas refrendado por el Alto Tribunal goza de especial reconocimiento en lo que se refiere a la Unión Europea. El Constitucional ha señalado en varias ocasiones que los Gobierno autónomos, en cuanto que titulares de una autonomía de naturaleza política para la gestión de sus propios intereses, se hallan directamente interesadas en la actividad que llevan a cabo las Comunidades Europeas".

Las funciones que la Xunta atribuye a sus delegaciones en el exterior se sitúan dentro del ámbito de la acción exterior y tienen que ver con la promoción de los intereses de Galicia y la coordinación de actuaciones de los diferentes departamentos del Gobierno, sin olvidar el apoyo a las comunidades de la emigración.