Chicano incorpora al bodegón clásico iconos picassianos e informáticos

El pintor malagueño Eugenio Chicano propone una revisión del bodegón clásico en las 32 obras de gran formato pintadas en los últimos dos años y que desde ayer y hasta el 17 de diciembre se exhiben en las salas del Museo de la Ciudad de Málaga. Visitación al bodegón clásico es un recorrido histórico por un motivo tan recurrente de la pintura como el bodegón, pero incorporándoles motivos picassianos y símbolos de programas informáticos.

Los tres elementos están mezclados en cada uno de los 32 acrílicos de la muestra, con la que según la historiadora del arte Silvia Alzueta, Chicano realiza una "relectura crítica", con la que además ha pretendido rendir homenaje a Picasso en el 125 aniversario de su nacimientos -Chicano fue el primer director de la fundación de la casa natal-. "Al realizar estos constantes deslizamientos temporales en los que aparecen en todo momento tres aspectos diferentes de la historia, como son la edad moderna, la vanguardia y el presente, la obra cuestiona la naturaleza del arte y el proceso del mismo", sostiene Alzueta.

Chicano dice haber elegido el bodegón "porque es de lo más abandonado y de lo más mal visto por los pintores". "Dentro de lo denostado que está, sacarlo a la luz, en su brillantez y en su discurso, me parecía más complicado, pero a la vez más bello", explicó en la presentación de la muestra.

A punto de cumplir 71 años, Eugenio Chicano presentó ayer la exposición de su obra más reciente con el júbilo de "un niño con zapatos nuevos". "Soy un privilegiado porque pintar es la cosa más maravillosa del mundo", confesó.