La temporalidad y la discriminación salarial se ceban en los jóvenes

Hay algo peor que tener un contrato temporal (si se tiene empleo, claro): ser una mujer joven. La mujer menor de 29 años de edad sufre una triple discriminación laboral, ya que en sus condiciones laborales se ceban con especial saña la temporalidad, una diferencia salarial en su contra y cierta discriminación, según cantan las estadísticas, de sexo. Así se desprende del informe presentado ayer por el sindicato CC OO de Cataluña, Aproximación a la realidad laboral de los jóvenes de Cataluña.

El informe concluye que la temporalidad entre los jóvenes aumenta más deprisa que entre el conjunto de los trabajadores, y que los contratos temporales casi duplican la media cuando quienes están detrás de ellos son los jóvenes. Las consecuencias están claras: si la media de salario de un trabajador con contrato indefinido es de 22.341,8 euros al año, en el caso de un trabajador con contrato temporal baja a 13.499,5 euros. Si el contrato indefinido es para un joven, la media es aún más baja (13.017,67 euros). Y si se es joven con un contrato temporal, la media disminuye aún más, hasta 11.314,6 euros. Pero son las mujeres de menos de 29 años con contrato temporal quienes ganan menos: 10.022,4 euros al año. Todo ello en un contexto en el que el metro cuadrado de nueva construcción en Barcelona, por ejemplo, ha subido en 1.000 euros (el 20%) en un año, hasta 5.082 euros.

CC OO llamó ayer a hacer realidad las medidas pactadas en el Acuerdo Estratégico para la Competitividad de la Economía, en el Plan de Educación y en la Ley de la Vivienda para mejorar la situación laboral del colectivo.

En 2005, la temporalidad aumentó. Lo hizo en un 2,9% y el problema afectó al 24,8% de los contratos. Pero entre la población más joven, el aumento fue mayor, de 4,2 puntos, y la temporalidad se situó en el 45,9%, casi tres veces más que entre los trabajadores mayores de 30 años. Eso, si existe un puesto de trabajo. La tasa de paro de los jóvenes supera con creces la media (12% frente a 7%).

"El exceso de la temporalidad es un problema que hipoteca el funcionamiento de la persona y de la economía", afirmó ayer Andrés Querol, coordinador nacional de Jóvenes del sindicato.