Solbes centra las diferencias con Bruselas en el "interés nacional"

El vicepresidente segundo y ministro de Economía, Pedro Solbes, dijo ayer que las discrepancias entre el Gobierno español y la Comisión Europea (CE) sobre las nuevas competencias de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) se centran en la definición de la "seguridad" y el "interés nacional". Solbes reconoció, en los pasillos del Senado, que la legislación española en este punto "es excesivamente poco precisa".

Según el titular de Economía y Hacienda, Bruselas sostiene que "hay que aceptar" una libertad total de movimiento de capitales y que sólo se pueden fijar restricciones en casos concretos relacionados con "la seguridad o el interés nacional". "Y ahí es donde tenemos discrepancias, porque la legislación española es excesivamente poco precisa y ellos consideran que el decreto-ley afecta al movimiento del capital", añadió.

El real decreto-ley aprobado por el Gobierno el pasado 24 de febrero amplía las competencias de la CNE, lo que permitirá al organismo regulador analizar la OPA lanzada sobre Endesa por el grupo energético alemán E.ON. Esta norma, sobre la que Bruselas ha pedido información al Gobierno, será votada hoy en el Congreso para su convalidación.

En el mismo lugar, el Senado, y en el mismo sentido que Solbes, el ministro de Industria, José Montilla, recalcó la necesidad de fijar reglas comunes en el sector energético europeo y aseguró que, mientras tanto, es "preferible" defender los intereses estratégicos del país y apostar por las fusiones amistosas.

Desequilibrios

Montilla dijo que, si no se corrigen los "desequilibrios" entre los distintos mercados energéticos europeos, la actividad se podría concentrar "en unos pocos operadores", sin que ello suponga una mejora de la competencia en el sector.

En respuesta a una pregunta del Grupo Popular, el titular de Industria afirmó también que determinadas empresas energéticas de países como Francia, Italia o Alemania mantienen "importantes ventajas competitivas derivadas de posiciones dominantes o cuasi-monopolísticas". Según Montilla, teniendo en cuenta esas ventajas, "si no se corrigen esos desequilibrios, podríamos estar construyendo un mercado europeo de concentración en unos pocos operadores sin que eso redunde en una mayor competencia y eficacia en el sector".

Por otra parte, el presidente de La Caixa, Ricard Fornesa, ratificó ayer el apoyo de la entidad a la OPA lanzada por Gas Natural sobre Endesa, tras el auto judicial que ayer suspendió la oferta por constituir presuntamente el pacto con Iberdrola un acuerdo colusorio. Fornesa dijo que La Caixa sigue y seguirá adelante".

El próximo martes, el consejo de Endesa celebrará una reunión ordinaria, y en la misma está previsto que decida si presenta o no el aval de 1.000 millones de euros que exige la juez para continuar con las medidas cautelares.