Un mercado rentable y su 'talón de Aquiles'

El sector de las comunicaciones electrónicas presenta, según los análisis de la Comisión Europea, unas perspectivas cada vez más favorables. La industria está saliendo de un periodo de reducción de costes y amortización de deudas y el sector creció globalmente en Europa en un 4,6% en el pasado año, gracias sobre todo al abaratamiento de las comunicaciones fijas, al espectacular crecimiento de la penetración de la banda ancha en toda la Unión Europea y a la extensión de la telefonía móvil.

La comisaria responsable de Sociedad de la Información, Vivian Reding, ha lanzado el programa i2010 para impulsar este sector, al que se le achaca un alto potencial de crecimiento que puede arrastrar a otros sectores económicos. El comercio electrónico, por ejemplo, se considera positivo para dinamizar la economía, ya que el abaratamiento de costes que supone para las empresas podría influir en el precio final de los productos y, por tanto, en la inflación.

Para ello, Reding ha puesto el acento en la interoperatividad, es decir, que equipos y plataformas diferentes se comuniquen entre ellos, y la innovación.

Esta última es el talón de Aquiles europeo en este terreno, pues la inversión en investigación está muy por debajo de Estados Unidos y Japón. En la UE de los 15 países se invierten 80 euros por habitante en investigación y desarrollo de tecnologías de las comunicaciones electrónicas, mientras que en EE UU se invierten 350 euros, y en Japón, 400. Europa sólo dedica el 18% de sus inversiones en I+D a este sector, mientras que los otros dos grandes colosos están en el 34%-35%.

"Hoy hemos alcanzado la convergencia digital", dice Reding, "y ya tenemos voz sobre los protocolos de Internet IP, televisión en la web, música online y películas en los móviles... Ahora necesitamos concentrar nuestro gasto en investigación en estas tecnologías claves de la comunicación, como la nanoelectrónica", añade la comisaria.

Dentro del programa i2010, la Comisión ha propuesto, entre otras cosas, aumentar en un 80% la inversión en innovación y lograr un mercado abierto y competitivo.