La masonería dona al Museo Víctor Balaguer documentos de la época actual

La Biblioteca Museo Víctor Balaguer de Vilanova i la Geltrú (Garraf) se convertirá en un centro de referencia para los investigadores que quieran profundizar sobre la restructuración de la francmasonería en España a partir de 1975, tras años de persecución. El Ayuntamiento y el Supremo Consejo Masónico de España firmaron ayer un convenio por el que el museo recibirá una gran cantidad de documentación correspondiente al período 1975-2000 que permitirá a los historiadores acercarse a las biografías, los ideales y las acciones de quienes hicieron posible la reorganización masónica en España y su legalización en 1979.

Los documentos son mayoritariamente correspondencia de los altos grados de la jerarquía masónica española de este periodo. Francesc Bosch, soberano gran comendador del Supremo Consejo, aseguró ayer que se trata de una documentación de una "importancia extraordinaria", ya que forma parte del legado de miembros masónicos ya fallecidos. Del gran volumen de correspondencia, sólo se hará pública aquella en la que no aparezca el nombre de ningún otro miembro masón vivo. El alcalde de Vilanova, Sixte Moral, agradeció la confianza de los miembros de esta sociedad que fomenta los valores de la libertad, la igualdad y la fraternidad. El fundador del museo, Víctor Balaguer (historiador, escritor y político que llegó a ser ministro de Ultramar) fue también un relevante masón en la España de la segunda mitad del siglo XIX, lo que explica en buena medida el interés para que este museo, con la cesión documental firmada ayer, pase a ser un centro de referencia para el estudio de la francmasonería.

En estos momentos ya existen otras entidades en cuyas sedes se puede encontrar un voluminoso material sobre la francmasonería en España, como la Biblioteca Nacional, el Museo del Ejército y la biblioteca Arús de Barcelona, considerada lugar obligatorio para los investigadores de la masonería. Pero Bosch asegura que el museo de Vilanova se convertirá también en un centro de referencia para toda España. Para realzar la importancia de la cesión del legado masónico, reconoce que no es fácil que la francmasonería "ponga sus papeles al alcance de todo el mundo".

De momento, el depósito de la biblioteca museo recibirá una veintena de cajas llena de documentos hasta ahora no estudiados y más adelante le llegará más material. Francesc Bosch confía en que algun día se pueda abrir un museo nacional de la masonería, para lo que ya se han realizado algunas gestiones.