Víctor Mari Sáez rastrea los movimientos sociales de Internet en 'La Red es de todos'

Víctor Mari Sáez (Madrid, 1970), afincado en El Puerto de Santa María (Cádiz), ha coordinado un libro singular, La Red es de todos, que vio la luz recientemente en Editorial Popular.

"Este nuevo título es resultado de un trabajo continuo de más de diez años, que he venido desarrollando en un cruce de caminos: por un lado, el campo de los movimientos sociales, y por otro el ámbito universitario, en el que he colaborado con profesores de la UNED y de la Universidad de Sevilla", comenta el autor. "A partir de Portoalegre y Seattle, detectamos que había una eclosión, un signo de esperanza. Algo se estaba moviendo. Aunque desde la creación de la Red ya se pensaba que el ciberespacio podía ser un buen lugar para proyectar las utopías, hasta ahora las nuevas tecnologías habían ido siempre muy por delante de los movimientos sociales. Por primera vez, daba la impresión de que éstos estaban dispuestos a coger en marcha el tren de los últimos avances", añade el coordinador.

La Red es de todos se plantea así un doble objetivo: "De un lado, queremos ofrecer un marco teórico que anime a pensar el papel de la comunicación en los movimientos sociales. Proponemos algunos ejemplos de experiencias pioneras y que han tenido una repercusión notable, ya sean movimientos de resistencia a la globalización capitalista, o aquellos que orientan su trabajo a combatir la exclusión social", comenta Sáez.

De este modo, firmas como las de Manuel Chaparro, Jeff Juris, Juan José Salado, Igor Sadaba, Gustavo Roig o Carlos Guimaraes, entre otros, explican en las páginas de La Red es de todos el nacimiento y desarrollo de proyectos como Mediacentro, Nodo 50 o las Universidades Populares de Extremadura.

El volumen incluye un utilísimo directorio comentado de enlaces de Internet, a modo de Webgrafía para navegantes, realizado por Samuel Marí y Carlos Peláez con más de medio centenar de páginas web relativas a análisis críticos de la globalización, contrainformación e información alternativa, portales de desarrollo comunitario y educación popular o defensa del software libre.

El destinatario ideal de La Red es de todos es, a juicio de Víctor Mari Sáez, "un activista de cualquier organización, sea una asociación de barrio, un miembro de colectivos ecologistas o pacifistas que, sin necesidad de ser experto en comunicación, intuya las posibilidades de estos medios".