Mario Zorrilla reflexiona sobre la diversidad en la sala Karpas

Los espectadores de la sala madrileña Karpas viven las últimas horas del pirata y marinero Blaster en La última noche de José Orozco. Se trata deun monólogo interpretado por Mario Zorrilla y dirigido por Marco Llamas, quien también es responsable del texto. Zorrilla, que se enfrenta a uno de los trabajos más sólidos de su carrera profesional, habla en primera persona de Blaster o José Orozco, marinero español recluido en la cárcel de Madrid, condenado a muerte por los tribunales del rey de España de 1673. En su última noche antes de ser ahorcado por actos de piratería contra la corona, reflexiona.

Para Zorrilla, esta historia, basada en hechos reales, pone de relieve que hay distintas y respetables formas de vida: "El personaje pone en contraposición lo que él ha vivido, con ese nuevo mundo que se avecina para él, dado que la piratería se acaba y las nuevas naciones poderosas se están repartiendo el mundo...". "Es algo terriblemente parecido a lo que ocurre ahora Irak", añade Zorrilla. El actor comenta también que la obra está llena de referentes culturales de la literatura dramática europea, con guiños a Cyrano de Bergerac o el calderoniano Segismundo.

El montaje está puesto en pie por la compañía La Carmela creada por profesionales de larga trayectoria teatral y audiovisual. Como en otros montajes (El amor de Larra o Recital Claudio Rodríguez) hay un compromiso con autores contemporáneos y un teatro social no exento de crítica.

Blaster. Sala Karpas. Santa Isabel 19. Hasta el 1 de noviembre. Jueves, viernes y sábados, 21.30; domingos y festivos, 19.30. Entrada: 12 euros