TVE
Puesto que la televisión es, por excelencia, "la imagen", resulta inimaginable que el Estado quiera venderla. Solbes sostenía que mediante ese ingreso mejoraría la educación, pero ¿qué mejor educación que la proporcionable por ese medio?
Ahora resulta, además, que TVE ha bajado en junio hasta el tercer puesto en la audiencia y que ha perdido incluso la supremacía en los informativos. Con esto se cumplen dos supuestos: aquel que interpreta la decadencia como un subterfugio para liquidarla y otro que responde a la idea de la directora general: "Si se mejoran los contenidos, no me importa perder audiencia". El resultado, sin embargo, ha venido a ser que sin apenas cambiar nada, la audiencia ha huido. ¿Lo hace porque desea denigrarse más? ¿Lo hace porque no le ofrecen nada importante?
De la misma manera que un público malo perjudica a la televisión, la televisión puede perjudicar al público. ¿Qué sucedería, no obstante, si esta interacción se interrumpiera y la audiencia empezara a sentirse dignificada? ¿Qué reacción cabría esperar si los programas fueran realmente interesantes y los espacios de humor dejaran de apoyarse en hombres groseros disfrazados de mujer? ¿Qué pasaría, en fin, si por esta calidad de la televisión pública y una reducida publicidad se exigiera una cuota? ¿Fracaso total?
Alguna vez la "España de la cultura" debería empezar a verse. ¿Por qué no verse por televisión? No una España de la cultura para gentes sesudas, sino una España mejor cultivada, de la misma manera que se hacen planes para regadíos o plantas de potabilización. No sólo, como dice Peces Barba, la Ley de Universidades es "infumable", también la televisión sin intervención es intragable. Será preferible, por tanto, una televisión más nutricia aunque no alcance la cima del ranking, porque si el Estado no promueve una imagen ejemplar se queda en casi nada. Por el contrario, una pantalla activada a favor de la moral pública, el conocimiento, el humor inteligente y el buen gusto, debe aumentar el valor/país. De no intentarlo se perdería una excelente oportunidad, pero si se fracasara también habríamos aprendido mucho, en vistas al exilio.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Un récord para Mbappé en la noche del desencanto del Bernabéu con el Real Madrid
La Real Sociedad ya tiene nuevo entrenador: Pellegrino Matarazzo
Una manifestación recorre el centro de Valencia para denunciar que el precio de la vivienda es “impagable”
Real Madrid - Sevilla | Mbappé, tras igualar el récord de goles de Cristiano: “La celebración era para él, es mi ídolo”
Lo más visto
- Uno de los promotores de la señal V-16 de tráfico: “Es duro oír el testimonio de víctimas que han sufrido amputaciones al poner los triángulos”
- Cae una organización que enviaba camiones cargados de cocaína desde Marbella hasta varios países europeos
- Más de 40 congresistas demócratas piden por carta a Trump que cese en sus “intentos de socavar la democracia en Brasil”
- La policía registra varios domicilios y las oficinas de la ministra francesa Rachida Dati por otro presunto caso de corrupción
- La Administración de Trump publica solo una parte muy censurada de los papeles de Epstein, aunque la ley le exigía difundirlos “todos”




























































