Trabajo responde a Sáenz que el Estado social "no es despilfarrador"

El Ministerio de Trabajo, los sindicatos e IU arremetieron ayer contra el vicepresidente del Banco Santander, Alfredo Sáenz, por haber afirmado que "hay que desmontar" el Estado de bienestar. El Gobierno dijo que el modelo social "no es especialmente poderoso y despilfarrador", y las centrales y la coalición de izquierda tildaron esas declaraciones de "indecentes". Josep Oliu, presidente del Sabadell, sí apoya a Sáenz.

Las afirmaciones que vertió el miércoles en Bilbao Alfredo Sáenz han provocado una oleada de críticas desde las centrales y desde IU, sobre todo por provenir de quien "se ha blindado un fondo de pensiones de 60 millones de euros". El Gobierno bajó el listón de la crítica, aunque fuentes de Economía y del Grupo Parlamentario Socialista aclararon que no comparten esas declaraciones del responsable bancario. Su posición se refleja "en los compromisos electorales", que abogan por garantizar la viabilidad del Estado de bienestar, e incluso prevén ampliar la cobertura a las personas dependientes.

El secretario general de Empleo, Valeriano Gómez, replicó al responsable del Santander que el modelo social español "no es despilfarrador" y debe sufrir adaptaciones, pero no para desmantelarlo, sino para seguir desarrollándolo y hacerlo más productivo.

Comisiones Obreras considera las declaraciones de Sáenz "indecentes y una provocación" y defiende el sistema de protección para "ponerlo a salvo de los hooligans del liberalismo". El líder de UGT, Cándido Méndez, cree que Sáenz "representa el peor tópico de la Europa de los banqueros y preconiza la anti-Europa". Las declaraciones de Sáenz "también confrontan con la Constitución Española", a juicio del coordinador general de IU, Gaspar Llamazares.

Quien sí suscribe las tesis de Sáenz es Josep Oliu, presidente del Banco Sabadell. En su opinión, "el menor crecimiento de la UE está relacionado con el coste del Estado de bienestar", aunque pidió "consenso político" para las reformas. La patronal bancaria, AEB, no quiso hacer ningún comentario.