Un pecho de Janet Jackson ruboriza a CBS

Ni la victoria de los New England Patriots en los últimos segundos, ni la retransmisión impecable del partido, ni la emisión intercalada de los mejores anuncios del año; la Super Bowl del pasado domingo pasará a la historia en EE UU como el partido en el que Janet Jackson enseñó un pecho. Ocurrió en el descanso del encuentro, convertido históricamente en el acontecimiento televisivo del año. La retransmisión de la Super Bowl incluye siempre en el intermedio el montaje de un espectáculo aparatoso, festivalero, grandilocuente y afortunadamente breve. En años anteriores han actuado desde Michael Jackson (que consiguió más espectadores en el intermedio que en el resto del partido) hasta Britney Spears o Sting. El programa incluía al supuesto cantante P. Diddy, el rapero Nelly, el siempre enfadado Kid Rock y, como gran estrella de la noche, Janet Jackson, la "hermanísima". En medio de su actuación, apareció entre bambalinas un invitado sorpresa, Justin Timberlake, para cantar a dúo la sugerente Rock your body. Y al final de la canción, ocurrió el acontecimiento de la noche. Timberlake posó su mano, bien abierta, sobre el corpiño de cuero negro que llevaba Janet Jackson. La mano aterrizó intencionadamente sobre uno de los pechos de la cantante. Con un movimiento rápido, preciso y admirablemente ejecutado, Timberlake arrancó el trozo de cuero que cubría el seno de la artista, que quedó al aire, en libre flotación. El espectáculo había sido producido por la MTV, propiedad de Viacom, es decir, la misma compañía a la que pertenece la cadena CBS, que retransmitía el encuentro. Son extraños compañeros de cama: mientras la MTV destaca por su atrevimiento visual, la CBS es conocida por su rancio conservadurismo. La cadena asegura que ignoraba que la actuación incluyera el destape y ha pedido disculpas a la audiencia. La FCC, el organismo regulador de las telecomunicaciones, ha lamentado que la CBS "tiñera el espectáculo deportivo con un acto grosero y deplorable". Y los cantantes dicen ahora que la liberación pectoral no estaba prevista, sino que fue debida a un accidente del vestuario, algo poco creíble: Janet Jackson llevaba su pezón estratégicamente cubierto con unos diamantes.-