Bancaixa decide deshacer la operación de compra-venta de la antigua sede de la CEV

El consejo de administración de Bancaixa aprobó ayer en Castellón deshacer la compra-venta de la antigua sede de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) en la calle de Músico Peydró que le costó el cargo al secretario general de la patronal, Pedro Coca. La decisión de Bancaixa devuelve a la CEV la propiedad del edificio al traspasar el leasing de Sait, compradora del mismo, al Instituto Valenciano para la Gestión Empresarial (Ivage), mercantil creada por la patronal de Valencia. El consejo convocó la asamblea general de la que saldrá nuevo presidente el 15 de enero.

Cuando el pasado 24 de septiembre la CEV formalizó la destitución de su hasta entonces secretario general, Pedro Coca, consecuencia de la polémica suscitada por la venta del edificio de Músico Peydró de Valencia para pagar la deuda por irregularidades en la gestión de los fondos de formación, también defendió su decisión de recuperar el edificio. La operación aprobada ayer por el consejo de administración de Bancaixa concreta esta decisión. En una reunión mantenida en Castellón, el consejo de la caja de ahorros valenciana acordó una operación con la cual traspasa el leasing mediante el cual Sait (Servicios Avanzados de Información y Telecomunicaciones) compró la antigua sede de la patronal al Instituto Valenciano para la Gestión Empresarial (Ivage), la mercantil de la CEV propietaria originariamente del edificio que vendió.

Con la venta de la antigua sede de la patronal provincial de Valencia, la CEV buscaba ingresar en un ejercicio el equivalente a las ayudas oficiales para la formación profesional que había recibido durante 12 años. Quedaba por concretar el destino final del edificio. La operación, en cualquier caso, abrió una crisis en la patronal que preside Rafael Ferrando.

El consejo de administración de la caja de ahorros valenciana también convocó ayer la Asamblea General Constituyente para el próximo 15 de enero. La Asamblea se celebrará en Castellón y en ella se elegirá al sustituto de Julio de Miguel en la presidencia de Bancaixa. Julio de Miguel, que anunció por sorpresa a finales de octubre su decisión de no optar a la reelección al frente de la entidad, agradeció ayer a todos los miembros del Consejo de Administración la colaboración y el apoyo prestado durante su etapa en la presidencia. Cabe recordar, además, que a finales de noviembre, el aún presidente de Bancaixa presidió por última vez la asamblea general en un encuentro en el que defendió los hitos alcanzados por la primera caja valenciana bajo su mandato. El abandono de Julio de Miguel, por otro lado, sitúa a José Luis Olivas, ex presidente del Consell y ex consejero de Economía en primera línea en la carrera por la presidencia de la entidad financiera valenciana.