Buen tono del Sevilla y el Málaga

Aunque parezca mentira, el Sevilla y el Málaga disputaron ayer un partido vibrante, abierto, lleno de pasión y buen fútbol, pero sin goles. Las buenas ocasiones generadas fueron anuladas unas veces por el acierto de los porteros, otras por asombrosos fallos de los delanteros y las más por el pésimo estado del engañoso cesped de Chapín.

El Málaga, agazapado, volvió loca a la defensa rival en el primer tiempo gracias a Dely y Darío. El Sevilla le arrinconó luego. Hubo grandes paradas, disparos a los palos y hasta goles fantasma en un encuentro que se dividió, como los puntos, en una parte para cada equipo.