El alcalde mantendrá en el cargo a los ediles imputados en el 'caso funeraria'

El alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, afirmó ayer que mantendrá en el cargo hasta el final de legislatura al concejal de Salud, Simón Viñals, y al de Patrimonio, Antonio Moreno. Ambos ediles están acusados de supuesta prevaricación y malversación de fondos en el proceso de privatización de la Empresa Mixta de Servicios Mixtos, el llamado caso funeraria. 'No voy a destituir a nadie. Son absolutamente inocentes', aseguró el alcalde. El regidor defendió a sus ediles a capa y espada: 'Creo en la presunción de inocencia, y espero que así quede demostrado en el juicio oral, que sólo se abre por una mala intención de carácter político. Si Dios quiere, y esperamos que la justicia lo vea, los concejales quedarán absolutamente libres de responsabilidad', agregó.

Viñals y Moreno, junto al diputado regional Luis María Huete, se enfrentan a penas de seis años de prisión y 25 de inhabilitación por su participación en la venta del 49% de la empresa funeraria a la compañía privada Funespaña por un precio inferior a su valor (0,60 euros). El fiscal ha pedido para todos prisión provisional. Además, el alcalde, en declaraciones a la cadena Cope, manifestó ayer que se va a llevar 'un disgusto' cuando acabe su etapa en el Ayuntamiento.

'Después de tener esta responsabilidad durante tanto tiempo se va a producir una situación muy extraña y, desde el punto de vista humano, dolorosa, pero intentaré superarla lo mejor posible', comentó el alcalde. 'Todavía nadie me ha ofrecido nada ni yo he pedido nada a nadie. Seguro que en el momento adecuado surgirá alguna circunstancia. Y si no, como soy inspector de Hacienda, volveré a mis comienzos y me tendré que reciclar', concluyó.