Alemania se impregna de la confianza de Khan

Vista desde la portería, Alemania transmite hoy la seguridad de un equipo tricampeón (1954, 1974, 1990). Oliver Khan (Karlsruhe, 1969) no sólo parece un portero inaccesible sino que además es el capitán y se lo cree, de manera que la selección se proyecta con una fiabilidad sorprendente si se atiende a los malos augurios que despertó cuando Rudi Voeller tuvo que dar una lista de convocados lastrada por la lesiones. 'Nunca había visto una selección alemana tan pobre', anunció entonces Cha Bum Kun, exseleccionador coreano y exariete del Bayer Leverkusen en la Bundesliga, muy en la línea de los aficionados todavía desanimados por la derrota ante Croacia en los cuartos de final del pasado Mundial-98. 'Llegar a cuartos de final en Asia ya sería un éxito', añadió el propio presidente de la Federación Alemana, Gerhard Mayer-Vordfelder.

Hoy, en cambio, las paradas de Khan y los goles de Miroslav Klose, pichichi del torneo con cinco tantos, han revitalizado al equipo hasta el punto que Karl Heinz Rummenigge ha dicho que el equipo que hoy se enfrenta a Estados Unidos le recuerda al que alcanzó la final en México 86: 'Entonces tampoco nadie creía en nosotros y llegamos a la final'. Por no hablar ya del propio Maradona, líder de aquella Argentina que doblegó en la final a los alemanes, y que anuncia: 'Alemania parece invencible'. 'La llave la tiene Khan', añade, 'porque tiene una gran personalidad y da confianza al equipo'. Y Khan, que sueña con levantar la Copa como Zoff en la Italia de 1982 o como Schmeichel en la Dinamarca del Europeo 92, responde: 'Es cuando uno pone más empeño en su trabajo que puede esperar una recompensa mayor. No pienso que nada impida lograr mis objetivos y los de la selección. La meta es ganar y ganar'.

Khan evita los goles y Klose los marca, y entre ambos, como punto de unión, aparece Ballack, que anda renqueante, con un problema en una pantorrilla, aunque Voeller asegura que le alineará. La Alemania de Khan se siente cada vez más confiada y segura. A Estados Unidos, por lo demás, ya le ganó en un amistoso disputado recientemente en Rostock (4-2).