Japón debe mantener su curso

Parece que la economía japonesa ha salido estos días de la unidad de cuidados intensivos. La Bolsa ha subido un 10% desde comienzos de año, lo que representa el mejor registro entre los principales mercados. (...) La economía creció a una tasa muy alta en el primer trimestre y se espera que haya un alza en los beneficios el año que viene. Y con la confianza en las empresas norteamericanas golpeada a fuerza de escándalos, el sistema japonés empieza a parecer mejor en comparación.

Sin embargo, no debiera el Gobierno japonés ver la desaparición de los nubarrones como una señal de que pueda cejar en sus reformas económicas y financieras. De hecho, hay pocas pruebas de que las ganancias económicas japonesas vayan a ser algo sostenible. (...) El Nikkei ha ganado este año, pero sigue con un 35% de pérdidas desde la primavera de 2000, cuando estalló la burbuja bursátil mundial. (...) Tampoco hay señales de crecimiento de la productividad. (...) Desgraciadamente, ese modelo parece persistir. (...) De hecho, para conseguir que persista un crecimiento sólido, Japón tiene que liberar su mercado laboral y reformar su sector financiero. (...) El sistema bancario está en crisis con un 11% de créditos fallidos del total de su cartera crediticia. (...) Una rejuvenecida economía japonesa proporcionaría una inyección de salud al sistema económico global. (...) Podría resultar verdad que por fin se ha recuperado la economía japonesa, pero muchos problemas siguen estando ahí, y no hay razón para dejar de hacer reformas.

Nueva York, 7 de junio