FALSA ALARMA EN UN CONVENTO DE ÁVILA

El susto no se les puede quitar a las monjas abulenses de la institución Charitas, que avisaron a la Guardia Civil ante la llegada de un paquete que contenía 'un polvo sospechoso' a raíz de la psicosis desatada por el ántrax (carbunco) en Estados Unidos durante los últimos meses. El sobre, enviado desde Phoenix (Arizona) por remitentes conocidos de las monjas, contenía un libro antiguo, de cuya cola seca de encuadernar se supone que procedía el amarillento polvo. Aunque no tiene visos de ser sospechoso, si bien los análisis deberán decir la última palabra dentro de unos días, las hermanas de la Congregación Hijas del Buen Pastor y María Inmaculada de Ávila alertaron a las autoridades sanitarias y tanto cinco monjas como una empleada de su residencia de ancianos, el cartero y tres empleados de Correos han comenzado a recibir un tratamiento preventivo según el protocolo químico-profiláctico establecido por el Ministerio de Sanidad. El director del hospital Nuestra Señora de Sonsoles, Eduardo Mirón, ha restado importancia al hecho y ha afirmado que 'no hay peligro alguno' y que 'las posibilidades de que el paquete tuviese ántrax son mínimas'. La madre superiora de las monjas, María del Corazón Divino, no ofreció detalles del asunto, aunque afirmó que las hermanas se encuentran 'en buenas condiciones de salud, gracias a Dios'.