Cambio de tono

Los inversores veían negro el panorama bursátil en las primeras horas de esta jornada como consecuencia de la persistencia de los problemas derivados de la crisis argentina, que forzaron un nuevo recorte de las cotizaciones. Sin embargo, a medida que avanzaba la sesión, el tono fue cambiando a gris, esta vez por el buen ambiente de los mercados internacionales.

Al final, el Ibex 35 cedió el 0,54% y el índice general de Madrid el 0,43%, con la particularidad de que en esta ocasión el volumen negociado en el Mercado Continuo fue de 2.496,48 millones de euros, la sexta cifra en importancia de este año, y con sólo 300 millones de euros en operaciones institucionales.

Para algunos observadores, este incremento del negocio estaba más relacionado con la absorción de papel de los grandes valores que con un cambio de postura de los inversores, puesto que más de la mitad del total contratado ayer procedía de los cuatro valores más involucrados en la crisis de Argentina.

En Alemania se celebró la mejora del clima empresarial por quinto mes consecutivo, a pesar de que sólo un día antes el presidente del Bundesbank, Ernst Welteke, afirmaba que las expectativas de una recuperación económica en la UE esta primavera 'son más un resultado de las esperanzas puestas en los datos económicos que de los propios datos'. Aun así, la Bolsa de Francfort ganaba el 1,41% poco antes del cierre.

La Bolsa de Nueva York apoyó su recuperación en el incremento de la confianza de los consumidores en marzo y en la discreta subida de los pedidos de bienes duraderos de febrero, dos datos que rompen con una serie de indicadores negativos que habían cuestionado la velocidad de la recuperación económica en Estados Unidos. El Dow Jones mantenía una subida de 115 puntos, el 1,12%, a media sesión.