Un partidario del diálogo con los nacionalistas

La víspera de ser asesinado, Juan Priede Pérez acudió al cementerio de Lasarte a depositar unas flores con las que el socialismo vasco quería recordar el primer aniversario del asesinato del concejal Froilán Elespe. En primera fila, junto a la alcaldesa de Lasarte, Ana Urchueguia, estuvo en aquel emotivo acto Juan Priede y no debió de intuir que su destino iba a discurrir paralelo al de su compañero asesinado por ETA. Según todos los testimonios recogidos ayer en Orio entre sus compañeros socialistas y vecinos de su pueblo, Priede, al igual que Froilán Elespe, se rebelaba y no estaba dispuesto, a sus 69 años, a vivir esclavo de la seguridad. Era, sin embargo, el único concejal no nacionalista de Orio y un objetivo señalado de la banda. Tenía asignado un escolta desde hace más de un año, pero le fue duplicada la vigilancia cuando la Ertzaintza supo que era 'objetivo inminente' de un comando. Precisamente el pasado verano fue evacuado rápidamente de Zarautz, adonde había acudido a una reunión de la Mancomunidad de la comarca, al percibir sus vigilantes que era seguido por varias personas.

Priede era 'un asturiano que ha vivido el socialismo y sus valores democráticos desde la cuna, con la historia de su familia', como lo definía ayer con reverencia, Juan Miguel Leunda, concejal de EA de Orio al que le unía una gran amistad. Vinculado estrechamente a este pequeño municipio de pescadores donde habían nacido su mujer y sus tres hijos, Priede regresó a Orio hace cinco años, al quedar viudo y después de jubilarse de la plantilla de Explosivos Riotinto que lo retuvo durante 20 años en el municipio vizcaíno de Gallarta.

Recuerdo de su bonhomía

La pasada legislatura aceptó sustituir al entonces concejal socialista, que dimitió. Y repitió como cabeza de lista en 1999. Su bonhomía y su carácter dialogante lo recordaban ayer sus compañeros de corporación que acudieron atónitos e impresionados al lugar del atentado. 'En el Ayuntamiento hemos tenido muy buenas relaciones personales y políticas', reconocían algunos de sus compañeros. 'Priede no tenía inconveniente en sentarse a hablar con todos, incluidos los de Batasuna, para tratar temas relacionados con la gestión municipal'.

Responsable de la agrupación socialista oriotarra que cuenta con medio centenar de afiliados aproximadamente, Elespe había trabajado en el debate precongresual dentro de la corriente Nuevo Socialismo Vasco que lidera Gemma Zabaleta, partidaria del diálogo y la aproximación al nacionalismo.

José Antonio Priede, hermano del concejal asesinado, declaró ayer en el municipio de Ponga (Asturias), de donde era natural el edil, que la familia había tratado de convencerle muchas veces para que dejara la actividad política. 'Hace pocos meses murió nuestra madre y volvimos a decírselo. Pero él nos decía que ésa era su vida. Él tenía esas ideas y no hubo nada que hacer', informa Javier Cuartas.