Hallado en Navarra el coche del presunto etarra fugado de Alicante

La Guardia Civil localizó ayer en el pequeño pueblo navarro de Aoiz, a 25 kilómetros de Pamplona, en la carretera en dirección a Francia, el coche en el que huyó de su casa de Torrevieja (Alicante) el miembro de ETA Anartz Oiartzabal tras la explosión en la que perdió la vida su novia, Olaia Castresana, cuando manipulaba una bomba con diez kilos de dinamita. El Ford Mondeo gris metalizado matrícula 6685-BCV fue localizado a las ocho y media de la mañana de ayer, ocho días después de su precipitada huida.

El coche se encontraba aparcado en el barrio de San Miguel, en Aoiz, localidad situada a más de 600 kilómetros de Torrevieja, y no contenía explosivos. Aunque deberá ser confirmado con la investigación, la impresión inicial de los expertos ayer era que el coche fue aparcado por el etarra en el mismo lugar en el que se encontró. Ello permite deducir que Oiartzabal viajó directamente desde Torrevieja hasta Aoiz el mismo día 24, teniendo a su favor las horas que transcurrieron desde que se produjo la explosión hasta que los cuerpos policiales confirmaron que no había sido un accidente.

Los cuerpos de seguridad españoles y franceses estaban alertados desde el martes 24 de julio para tratar de localizar el vehículo con el que Oiartzabal se había dado a la fuga. Era un dato del que dispusieron desde el primer momento ya que el etarra 'conocía perfectamente la zona y no era una persona extraña para sus vecinos, porque se encontraba en la misma vivienda en la que probablemente había ido desde pequeño numerosas veces a disfrutar de sus vacaciones', desveló ayer en Málaga el director general del Cuerpo Nacional de Policía, Juan Cotino.

En el interior del Ford fueron hallados un mapa, un teléfono móvil y otros objetos que están siendo investigados por los especialistas de la Guardia Civil. Estos adelantaron, no obstante, que en el coche no había manchas de sangre, lo cual permite deducir que Oiartzabal no resultó herido en la explosión y descartar a la vez una de las hipótesis que se barajó desde el primer momento.

Cotino destacó también la importancia de la localización de este coche porque va a permitir abrir nuevas vías de investigación. Además de lo que proporcionen los objetos localizados en su interior, las huellas dactilares permitirán establecer una conclusión sobre si el comando etarra lo integraban en exclusiva la pareja formada por Anartz Oiartzabal y su novia, Olaia Castresana, o había una tercera persona de apoyo. Y añadió la dificultad que entraña descubrir a estos comandos formados por jóvenes 'que usan las vacaciones y los fines de semana para repartir la muerte donde pueden'.