Tapias responsabiliza al sector público de la escalada de la inflación

La asamblea de la patronal de Madrid tuvo ayer como testigos directos a una representación empresarial, encabezada por Isidoro Álvarez (El Corte Inglés), Alfonso Cortina (Repsol), Miguel Blesa (Caja Madrid), Victoriano Reinoso (Unión Fenosa), Florentino Pérez (constructora ACS), Santiago Foncillas (Dragados) y Carlos Pérez de Bricio (Cepsa). Testigos indirectos fueron, desde las calles adyacentes a la sede de la patronal, los trabajadores de Sintel, que pedían solución a su conflicto.

Fernández-Tapias les dedicó parte de su discurso. Aseguró que la acampada de Sintel, que se prolonga desde enero en el madrileño paseo de la Castellana, es 'un espectáculo que no debe continuar'. Aun reconociéndoles el derecho a cobrar por el tiempo trabajado, criticó sus medidas de protesta y añadió que 'empresas que no llegan a buen término, que quiebran, que tienen que cerrar, no son un hecho insólito, sino producto del libre juego del mercado'. Después dijo que 'la ocupación de terreno público nunca debió autorizarse'.

Al auditorio de empresarios les dedicó la parte de su discurso en la que analizó los problemas de la economía, donde 'la mayor amenaza' es la escalada de la inflación, que en mayo se situó en el 4,2% en tasa interanual. 'Nos parece muy bien', dijo, 'que el Gobierno trate de localizar a los causantes de la inflación. Nos permitimos sugerirle que no se limite a buscarlos fuera de su entorno. Porque uno de los principales culpables lo tiene dentro, en el sector público'. En concreto, en la subida de los precios administrados y de los tributos.

Fernández-Tapias mostró su 'decepción' ante la decisión del Ejecutivo de paralizar la reforma del Impuesto sobre Sociedades y reclamó una rebaja en torno a la media europea, así como la mejora de los incentivos a la inversión empresarial y del límite conjunto de tributación del IRPF y el Impuesto sobre Patrimonio, 'que en algunos casos llega a ser confiscatorio'.

Otro problema que analizó es el de los accidentes en el trabajo, donde encuentra una relación directa de carácter causal entre el crecimiento de la actividad empresarial y la posibilidad de que surjan siniestros laborales. 'Si no fuera porque el tema es muy serio', afirmó, 'como todos en los que están en juego vidas humanas, podríamos decir que la única posibilidad real de que no existan accidentes de trabajo es que no haya trabajo'.