Las aerolíneas privadas exigen medidas para que la huelga no les afecte

Al malestar de los pasajeros de Iberia afectados por los retrasos y cancelaciones provocados por la huelga de pilotos se une ahora el de las compañías rivales de la aerolínea. La petición de la AECA, que representa a todas las compañías aéreas privadas (entre ellas, Air Europa y Spanair), se plasma en una carta que la asociación envió ayer a la dirección de Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea (Aena), organismo encargado de la gestión de los aeropuertos españoles. Quieren pistas libres -al menos en los aeropuertos de Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat- y proponen que se habiliten vías de acceso diferentes a las que utiliza Iberia para evitar que sus retrasos acaben extendiéndose a todas las compañías.

Las aerolíneas privadas aseguran que se están viendo afectadas por la 'actitud' de los pilotos de esta compañía y que las demoras van desde los 30 a los 60 minutos 'en gran número de vuelos operados desde los grandes aeropuertos como los de Madrid y Barcelona'. Según fuentes de AECA, sigue produciéndose 'un efecto dominó'. 'Las demás compañías aéreas estamos sufriendo retrasos derivados del conflicto existente entre los pilotos y la dirección de la empresa y queremos que Aena habilite otras vías para evitar que este conflicto nos perjudique'.

Una huelga de celo produce un desbarajuste en toda la red aérea. Los pilotos de Iberia, en huelga desde el 26 de febrero pasado, extreman al máximo la duración de las operaciones inherentes a todo vuelo, como el rodaje en pista, los despegues y los aterrizajes. Las maniobras rutinarias se alargan y repercuten de forma directa en el día a día de otras compañías. Otro de los problemas es que las compañías privadas alegan que están teniendo un sobrecoste en el combustible 'como consecuencia del conflicto', al tener que utilizar vías aéreas más largas y la imagen de servicio ante los clientes queda en entredicho. A la lista de inconvenientes citados por las rivales de Iberia se añaden los gastos extraordinarios que conlleva la congestión en los aeropuertos y en las vías aéreas.

En los últimos días, un avión de Iberia tarda unos 22 minutos en recorrer la distancia entre el aparcamiento hasta la cabecera de la pista de Barajas para despegar, según manifestaron fuentes aeroportuarias a la agencia de noticias Efe. El mismo recorrido se realiza, en circunstancias normales, en unos 10 o 12 minutos. La tardanza produce un efecto embudo para el resto de aeronaves y, en algunas ocasiones, puede provocar que un avión pierda el permiso para aterrizar o despegar y tenga que volver a solicitarlo, con el consiguiente retraso.

Efectos

Algunas de las compañías que integran la AECA tienen más motivos para temer los efectos de la huelga de Iberia. Es el caso de Spanair, que inició una campaña de puntualidad el 12 de febrero pasado, por el que la aerolínea se compromete a compensar a sus clientes con billetes gratuitos cuando sus vuelos sufran demoras importantes.

La otra gran compañía aérea de la AECA, Air Europa, también ha presentado sus quejas. La aerolínea calcula que la huelga de los pilotos de Iberia ha causado retrasos en sus vuelos de entre 40 y 60 minutos.