Acebes y el PSOE se acusan de crear campañas de presión al Supremo

El ministro de Justicia, Ángel Acebes, y el diputado socialista Juan Fernando López Aguilar se acusaron ayer mutuamente de montar campañas de presión sobre el pleno de la Sala Segunda del Tribunal Supremo para condicionar su próxima decisión sobre el indulto del ex juez Javier Gómez de Liaño. López Aguilar interrogó al ministro en la sesión de control al Gobierno en el Congreso sobre las consecuencias institucionales del reingreso en la carrera judicial del ex juez ordenado por el Gobierno en su indulto. Acebes le replicó que el Gobierno sí había valorado las repercusiones de ése y de los otros 1.442 indultos concedidos por el Consejo de Ministros, "frente a la actitud del PSOE que sólo ha analizado uno y arbitrariamente". Aguilar rechazó que el Gobierno intente mezclar con "esfuerzos patéticos" el único indulto "conflictivo" con otras medidas de gracia que no han cuestionado ni el tribunal sentenciador, ni el Consejo General del Poder Judicial ni ninguna de las asociaciones profesionales.

El diputado socialista criticó la actitud del ministro la semana pasada al desempolvar expedientes de indultos concedidos por los Gobiernos socialistas, en los que figuraban anotaciones a favor de indultos a alcaldes del PSOE condenados por fraude al PER. López Aguilar, conocedor en el Congreso de la acusación que Acebes le había lanzado por la mañana en el Senado a Jordi Solé Tura y al PSOE -dijo que "todo el mundo" sabía cuál era el fondo de la "campaña" montada por los socialistas por el indulto-, optó por devolver la pelota y acusar al Gobierno del PP de montar "campañas para influir en el pleno de la sala del Supremo".

Acebes respondió que no veía consecuente que el PSOE le requiriese precedentes sobre indultos similares al de Liaño y a la vez se molestase porque rebuscara en expedientes del pasado. El ministro acabó señalando a los socialistas como los autores de una "campaña contra la sala del Supremo" con el fin de demostrarle a los jueces que ese partido es el que "sigue mandando" y determinando quién puede dar indultos y declarar inocencias.