Aceptada la ayuda de buzos franceses para recuperar al espeleólogo muerto

Protección Civil aceptó ayer la ayuda que desde hace nueve días viene ofreciendo un grupo de especialistas franceses en rescate de espeleobuceadores para recuperar el cadáver del bilbaíno Alfonso Antxia, de 39 años, que murió el sábado en la Fuente Azul, una cueva subacuática de 100 metros de profundidad en el valle del río Arlanza (Burgos). Antxia, experto internacional en espeleobuceo -una disciplina poco practicada en España-, era amigo de Rubén Gomes, jefe del equipo francés, que puede llegar a 120 metros.Compañeros del muerto, bomberos y submarinistas de la Guardia Civil subieron ayer el cadáver siete metros, hasta los 60, justo en medio de una doble curva que hizo fracasar a un robot de la Guardia Civil para recuperar desaparecidos en aguas abiertas: el mar o embalses. La Guardia Civil confía en atrapar hoy el cadáver, en una inmersión "asequible para los equipos españoles": 60 metros es el récord español de profundidad.No es seguro, por tanto, que los buzos franceses participen, aunque Protección Civil haya aceptado al fin sufragar parcialmente su trabajo.