Christie's intenta capear el temporal de escándalos con la celebración de una subasta de impresionistas

La primera y anticipada subasta de primavera, que tuvo lugar el lunes por la noche en Christie's de Nueva York, parece indicar que el reciente escándalo sobre presuntas prácticas monopolísticas, en el que también está envuelto su rival -y, sin embargo, aliado Sotheby's-, no ha mermado el poder de convocatoria de los dos pilares del mercado mundial del arte. Ayer, Christie's tenía previsto poner a la venta la joya de esta temporada, un lienzo de Picasso, Nature morte aux tulipes, valorado en unos 25 millones de dólares (más de 4.000 millones de pesetas), mientras que Sotheby's contraatacará hoy con una obra impresionista, Le portail, de Claude Monet, estimada en 20 millones de dólares.La venta de obras impresionistas y posimpresionistas del lunes alcanzó en total 104,5 millones de dólares (unos 18.000 millones de pesetas). De los 47 lotes destacaron una versión de los nenúfares, Nympheas, de Monet, fechado en 1906 y que alcanzó los 20,9 millones de dólares, y una obra de Gustave Caillebote, L'homme au balcon, boulevard Haussman, que se vendió por 14,3 millones, el récord absoluto para este pintor francés.

Entre los otros triunfadores de la noche destacan otro cuadro de Monet, Le bassin aux nympheas, 6,8 millones de dólares, y una pintura de Renoir, Berthe Morisot et sa fille, Julie Manet, 8,8 millones de dólares. Christie's esperaba culminar ayer su temporada, en la subasta de arte del siglo XX, con un cuadro pintado por Picasso en 1932 en uno de los momentos más brillantes de su carrera, Nature morte aux tulipes, inspirado por su entonces amante, Marie-Therèse Walter. Las otras obras estelares de ayer eran un cuadro de Jasper Johns, Figura 3, valorado en tres millones de dólares; otro picasso, Buste de femme assise sur une chaise, cinco millones de dólares, y un retrato de Liz Taylor por Andy Warhol, dos millones de dólares. Sotheby's espera alcanzar el mismo éxito de ventas a partir de esta noche.

Éstas son las primeras subastas importantes que se celebran desde que el pasado febrero estallara el escándalo que ha afectado gravemente a la imagen de las dos compañías que se reparten el 95% del mercado mundial del arte. Hace dos meses, varias decenas de clientes acusaron ante los tribunales a Sotheby's y Christie's de llevar ocho años pactando las comisiones de sus operaciones de compra-venta y de compartir una lista de 50 clientes preferenciales. El Departamento de Justicia norteamericano también está en el caso para tratar de demostrar una posible violación de las leyes antimonopolio.

Aquellas revelaciones causaron la dimisión fulgurante de la cúpula de Sotheby's: su accionista mayoritario y presidente, Alfred Taubman, y su directora ejecutiva, Diane Brooks, figuras clave en el mercado artístico de Nueva York. Los litigios pendientes hicieron temer un estrepitoso fracaso para esta temporada, que su rival más próximo, Phillips, propiedad del magnate francés Bernard Arnault, ha intentado aprovechar. Pero los clientes no parecen haberse visto afectados por la batalla legal de los dos grandes.