Los usuarios piden "medidas urgentes" para acabar con el caos de los ferrocarriles

Las oficinas de reclamaciones de Renfe vivieron ayer una nueva jornada de saturación y protestas. Los pasajeros que se vieron afectados por la huelga indefinida del sindicato de maquinistas SEMAF pidieron "medidas urgentes y drásticas" para acabar con un conflicto que afecta a cientos de miles de usuarios de Renfe. Mientras, la página web que tiene la compañía ferroviaria en Internet (www.renfe.es) mantenía ayer los recorridos y los horarios anteriores a la convocatoria de paro y no informaba de que los servicios se habían suspendido por la huelga de los conductores.

Lo que sí ha suspendido Renfe es la venta anticipada de billetes mientras dure la huelga, que ayer consiguió exasperar a muchos usuarios en algunas estaciones de gran tráfico. En Madrid, un grupo de turistas franceses se quedó sin el viaje a Andalucía que habían desde hace varios meses y para el que habían facturado seis coches y dos motocicletas en París para recogerlas ayer en la estación madrileña de Chamartín. Cuando llamaron al servicio de información de Renfe, éste les indicó que el tren que traía sus vehículos estaba retenido en Hendaya. Sin embargo, el servicio francés de ferrocarril SNCF les indicó que el convoy se hallaba desde primera hora de la mañana en territorio español."Lo peor no es que haya huelga en los ferrocarriles españoles. Lo más lamentable es que no haya un responsable que nos diga la verdad. Además he pedido que nos dejen un microbús para ir a recoger los vehículos a Hendaya, si es que están allí, y me dicen que eso nos lo tenemos que gestionar por nuestra cuenta. Al final perderemos las reservas que tenemos previstas para toda la semana", explicó Michele Michell, una de las afectadas.

Un usuario de las líneas de cercanías de Renfe de la localidad madrileña de Fuenlabrada, Carmelo Segura, denunció al sindicato SEMAF por los perjuicios ocasionados por el paro indefinido y reclamó que, a cambio, se abone a los usuarios los billetes de transporte de las próximas vacaciones, informa Efe. Segura tuvo que hacer en taxi los 20 kilómetros que separan este municipio de la capital para recoger a su madre, que es diabética, y volver. En total, 6.000 pesetas.

Por su parte, la Unión de Consumidores de España (UCE) consideró que la huelga indefinida conculca un derecho fundamental de los ciudadanos y opinaba que "alguien tiene que responder", según explicó su portavoz, Rafael Urrialde. "No se garantizan ni los servicios mínimos, por lo que se conculca un derecho fundamental de los ciudadanos, frente al derecho a la huelga", dijo, y se preguntó que "en este caso qué tiene que prevalecer".

Mientras, desde el servicio de información telefónica de Renfe se recomendaba a los usuarios que no tuvieran billete que se desplazaran en autocares o en avión y advertían de que no podían garantizar la salida de los autobuses que sustituían al servicio regular. Las operadoras también informaban que se devolvería el importe de los billetes a todos los usuarios. A una pasajera que exigía el reembolso de las 6.600 pesetas del billete de Euromet Alicante-Barcelona se le indicó que debía acercarse a las oficinas de atención del cliente de la estación, donde le sería devuelto el 100% del importe.