Estrategia electoral a piñón fijo

"El asesinato de Fernando Buesa y de su escolta lo ha cambiado todo". El que habla es Carlos Iturgaiz, presidente del PP del País Vasco y responsable de la campaña electoral de su partido. La irrupción de ETA ha desbaratado gran parte de las estrategias que habían preparado los partidos para esta campaña. Las formaciones políticas han concentrado sus mensajes el la cuestión de la pacificación, en un momento en el que Euskadi aún vive la resaca de la doble manifestación del pasado sábado en Vitoria, que se ha traducido en una imagen de división política y social. "Ha quedado eclipsado el verdadero mensaje contra ETA. Parece que son los partidos nacionalistas que forman el Gobierno vasco, PNV y EA, los que han matado a Buesa", protesta Rafael Larreina, coordinador de la campaña de EA.Unas elecciones más, los partidos vuelven a ir a piñón fijo, como el ciclista que no echa mano de los cambios para facilitar su marcha, esté subiendo, bajando o llaneando. La abstención propugnada por EH ha dejado servida la polarización entre el PNV y el PP. "Es una polarización no querida por el PNV", asegura Francisco Allende, responsable de la campaña peneuvista. Sin embargo, el PNV no le va a hacer ascos al pulso con el PP porque puede ayudarle a movilizar a potenciales votantes nacionalistas que de otra forma no acudirían a las urnas. Así, le lanza constantes diatribas por su "inmovilismo" en el proceso de paz. El otro "adversario" del PNV estas elecciones es la abstención defendida por EH e "impuesta" por ETA, según Joseba Egibar. "No se sabe a quien puede beneficiar esa abstención", apunta Allende.

Cambio de lema

Y en medio de la polarización quieren abrirse un hueco el PSE, IU y EA. Tras el asesinato del dirigente socialista Fernando Buesa, el PSE incluso varió el lema de su campaña y se decantó Por la vida y la libertad. Según el director de campaña del PSE, Rodolfo Ares, los socialistas van a hacer hincapié en que el entendimiento con los nacionalistas es posible a la hora de hablar de la pacificación. "Intentaremos que no todo sea hablar de terrorismo. La gente tiene que visualizar que está en juego el Gobierno de España", resalta. Por eso, en los últimos días de campaña el PSE tiene previsto intensificar el debate con el PP sobre los problemas de índole nacional.

Y para reforzar este mensaje exhibirá su acuerdo con IU. La coordinadora de campaña de la coalición, María Luisa Sánchez, cree que el pacto también va ser una baza para su formación y apunta que IU se va a volcar en consolidar su escaño de Vizcaya.

Mientras, el PP parece más empeñado en convertir las elecciones en un duelo con el PNV. "No se puede obviar la repercusión que ha tenido en los nacionalistas todo lo ocurrido tras el asesinato de Buesa", dice Carlos Iturgaiz. Así, para el dirigente popular la clave va a radicar en que el electorado "moderado" del PNV va dar la espalda a los nacionalistas. Ese es el flanco que van a intentar aprovechar los populares con una estrategia especialmente preparada para ello y que procurará pescar adeptos en los vasos comunicantes que tienen ambos partidos. "La sociedad vasca está indignada con el lehendakari y con el PNV", apostilla Iturgaiz.

La aspiración de EA pasa por mantener su escaño de Guipúzcoa, aunque ha puesto sus miras en lograr un segundo diputado, en este caso en Vizcaya. Su táctica busca al voto que captó EH en los comicios locales, pero que no le fue fiel en las generales del 96.