Arquitectos y técnicos mejorarán el dossier del Palmeral ante la Unesco

El fracaso de la candidatura del Palmeral de Elche para ser considerado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco se intentará subsanar a través de una ronda de contactos con todas las personas implicadas en la redacción del expediente. Un equipo de arquitectos y técnicos atenderán las puntualizaciones del ente evaluador, Icomos, e intentarán que la candidatura supere la votación en el 2000.

El alcalde de Elche, Diego Macià, advirtió ayer tras su vuelta de la convención de la Unesco en Marraquech (Marruecos), de que se debe continuar trabajando con "insistencia" sobre la candidatura ilicitana para atender las directrices marcadas para que el palmeral se incluya en el catálogo de bienes mundialmente protegidos. La propuesta quedó sobre la mesa, el miércoles, después de que el comité evaluador anunciara su rechazo e instara a Generalitat y Ayuntamiento a no englobar en la candidatura a la totalidad de las palmeras de la ciudad, sino a un grupo de huertos de titularidad pública como representación del conjunto.La preparación para la próxima convención de la Unesco comenzará a mediados del mes de enero, con una primera reunión con los representantes de Icomos. El objetivo será especificar los puntos flacos del expediente para superar las deficiencias. Además, el Consistorio reunirá a un grupo de arquitectos locales para plantearles los criterios de la Unesco, y debatir con ellos cómo abordar la nueva candidatura. Otras aportaciones llegarán de manos de los técnicos que redactan el Plan Especial del Palmeral, que servirán para contrastar la situación de los huertos y elegir los mejor conservados.

Tras considerar "normal" no conseguir el reconocimiento en el primer intento, Macià negó que se hubiera producido descoordinación entre las administraciones interesadas, como criticó el jueves uno de los redactores del expediente, el CEU San Pablo de Elche. Esta institución académica negó que fueran técnicos los motivos que forzaron la retirada de la candidatura, sino "políticos", entre los que citó la ausencia de la anterior directora general de Patrimonio, Carmen Pérez, que impulsó el expediente inicial.

El director del CEU, Francisco Sánchez, aseguró que las puntualizaciones solicitadas por Icomos se podían haber subsanado "en tres horas". Para Macià, decir eso implica desconocer "absolutamente" el funcionamiento de la Unesco. "No se pueden incluir cambios de última hora, ya que antes de la decisión final hay que pasar por los filtros de Icomos, la mesa de patrimonio y el comité".

El expediente rechazado destacaba la singularidad del regadío de los huertos de palmeras, y la herencia cultural de los países árabes.