Desalojada en Fuencarral la Casa de Andalucía por orden judicial

Los dirigentes de la Casa de Andalucía en Madrid y el coro rociero Al-Alba entregaron ayer las llaves del local que ocupaban desde hacía cuatro años en el distrito de Fuencarral. El Juzgado de Instrucción número 38 ordenó su desalojo tras un largo proceso judicial. Ahora sus 600 socios buscan un nuevo edificio en el que puedan desarrollar los cursos y talleres que impartían.El desahucio de la Casa de Andalucía se paralizó el pasado 7 de octubre porque la junta directiva alegó que en el local se encontraba con anterioridad el coro. El juez estimó que en el proceso judicial estaba incluido también el grupo Al-Alba, por lo que ordenó que se desahuciara a sus integrantes junto con los socios de la casa. Los afectados alegaron indefensión por parte del coro y recurrieron el pasado 30 de octubre la decisión judicial. "El coro rociero es una entidad independiente de la Casa de Andalucía, que fue reconocida por la Comunidad de Madrid antes que la casa, que tiene su número de inscripción, sus propios estatutos y con cuentas bancarias distintas", explicaron los directivos de la casa andaluza.

El recurso, sin embargo, no logró parar la expulsión. La comisión judicial se presentó ayer a las 9.30 y pidió las llaves del local a las juntas directivas de la Casa y del coro (formado por 40 miembros).

El presidente de la federación de casas regionales andaluzas de la zona centro, Luis Grisolía, acusó al alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, del PP, de ser "un mal andaluz". Además adelantó que reunirá la junta de la federación y que ésta estudiará medidas para protestar.