Agricultura ecológica

Parece que últimamente se está abriendo un importante debate sobre la calidad de nuestra alimentación. Se cuestionan muchas formas de producción de alimentos y se reconoce, después de tantos escándalos, la agricultura biológica (ecológica u orgánica) como una importante alternativa. Aunque se le achaca como problema el alto precio de sus productos, derivado de los mayores gastos que tiene este sistema de producción.Respecto al que parece el único inconveniente de la agricultura ecológica, hay que decir que si las subvenciones concedidas a los agricultores fueran algo más que simple parche para la situación del medio rural en Europa y si los criterios que primasen en su concesión fuesen el impacto sobre el medio, la calidad, la sanidad, el uso de más mano de obra, la agricultura biológica saldría bastante mejor parada que la agricultura convencional. Y entonces, quizá, lo que fuera un lujo sería comerse una lechuga insípida y rociada con venenos químicos.

Aunque no se puede esperar que los gobiernos apuesten por una alternativa que hundiría a las tan poderosas y subvencionadas transnacionales agroquímicas, ya existe una forma de alimentación sana, los grupos de autoconsumo. En estos grupos se establecen relaciones directas, en cuanto a la compraventa, entre agricultores biológicos y consumidores, reduciéndose, al eliminarse los intermediarios, el precio de compra de los productos.-