Aznar responsabiliza a ETA y HB del bloqueo del proceso de paz en el País Vasco

José María Aznar responsabilizó ayer a Herri Batasuna y a ETA del estancamiento del proceso de paz en Euskadi. El jefe del Gobierno aprovechó su tradicional discurso de despedida de las vacaciones veraniegas en Quintanilla de Onésimo (Valladolid) para constatar públicamente la parálisis del proceso de paz, confirmada por la ausencia de contactos entre el Gobierno y la banda terrorista durante este verano, culpar a HB y ETA de esta situación, "porque tienen miedo a la paz", y reafirmar su voluntad de diálogo con la banda armada. También utilizó su mitin ante centenares de militantes del PP para lanzar un duro ataque contra el PSOE, por su actitud en la polémica de las pensiones y por pactar con los nacionalistas en Galicia y Baleares. Ambas cuestiones se perfilan como flancos primordiales de crítica al PSOE en la próxima campaña electoral.

Durante el mes de junio se crearon expectativas de que a lo largo de las vacaciones veraniegas, previsiblemente en esta segunda quincena de agosto, se produciría un nuevo contacto entre delegaciones del Gobierno y ETA, tras el primero de mediados de mayo. Pero Aznar reconoció ayer que el proceso de paz no ha avanzado durante estas vacaciones. Ni siquiera ha habido contactos."El presidente del Gobierno autorizó contactos con ETA y ahora dicen que no habrá una segunda reunión", señaló ayer. Aznar validaba con ello las recientes declaraciones del presidente del PNV, Xavier Arzalluz, y del portavoz de su partido, Joseba Egibar, en las que auguraban que a corto plazo no habría un nuevo encuentro entre el Gobierbo y ETA tras el celebrado en mayo en Zúrich (Suiza).

Aznar responsabilizó a ETA de que no se haya celebrado esta segunda reunión. "No aprecio voluntad en ETA de avanzar. Tienen miedo al proceso de paz porque deberían aceptar las reglas de juego". Pero, más aún, culpó a HB. "HB rompió el diálogo unilateralmente. Ofrecí el diálogo a todos los grupos parlamentarios representados en el Parlamento vasco sin excepción y esta oferta no fue respondida", señaló Aznar.

El presidente se refería a la reunión que delegaciones del Gobierno y HB mantuvieron en la primera quincena de diciembre y que posteriormente no ha tenido continuidad. Aznar, tras ese encuentro, hizo un nuevo llamamiento el 18 de diciembre en La Moncloa, que, según recordó ayer, no ha sido atendido hasta estos meses. El presidente recordó que no se ha producido un segundo contacto, "aunque había un orden del día acordado y aceptado" para la segunda reunión con la formación abertzale radical. "HB no fue porque tienen miedo a la paz", afirmó.

Con la intervención de ayer, Aznar hace pública la convicción de su Ejecutivo de que el proceso de paz está estancado por los problemas internos de HB que, tras la salida de prisión en julio de la anterior Mesa Nacional, ha abierto un proceso de debate que debe culminar con la elección de una nueva dirección a final de año.

Aznar también quiso aclarar ayer que si el proceso de paz está estancado no es por su deseo y, para que no haya dudas, reiteró su oferta de diálogo. "El Gobierno reafirma su voluntad de llevar a buen término el proceso de paz", dijo. También pidió al PNV que reflexione sobre su orientación política, a la vista de los resultados de las elecciones municipales, en las que ha sufrido un serio retroceso, y abandone el pacto de Lizarra. "Hago un llamamiento a que el nacionalismo democrático no se mantenga en posiciones que la sociedad ha rechazado", dijo.

El mitin tomó ribetes electorales cuando inició su duro ataque contra el PSOE, centrado en el aumento unilateral de las pensiones por parte de algunas autonomías y en los pactos poselectorales.

"El año pasado el tercer candidato del PSOE", dijo, en alusión a José Borrell, "se desgañitaba tratando de convencer a la audiencia de que la Seguridad Social estaba en quiebra. Ahora subastan al alza las pensiones porque reconocen que España va bien", señaló Aznar, que enseguida volvió a la carga: "Quieren presentarse como salvadores de los pensionistas quienes estuvieron en el único Gobierno de la democracia que ha recortado las pensiones". El presidente aseguró que se opondrá a que las comunidades autónomas las aumenten. "El Gobierno hará todo lo que esté en su mano para evitarlo".

"Hace unas semanas", continuó arremetiendo contra los socialistas, "les dolía España, pero a la vista de lo que han hecho en Galicia y Baleares parece que el dolor se les ha pasado". En la misma línea, recordó que "hace un año, el PSOE rompía el Gobierno vasco por la fórmula del juramento de los parlamentarios nacionalistas [juraron por imperativo legal] y ahora hacen un gobierno en Baleares con una fórmula peor que en Vitoria", agregó, en referencia al juramento de algún nacionalista en favor del derecho a la autodeterminación. Aznar concluyó que el PSOE tiene "pavor a la renovación". "Están en el resentimiento y en la revancha frentista", añadió.

Frente a este panorama, contrapuso los logros de su gobierno: la entrada de España en la unión monetaria, el descenso del paro y el cese de la violencia terrorista.