El delator del asesino de Trini Agulló lo hizo al conocer otro crimen

El remordimiento va siempre un paso por delante de la razón. El delator del presunto asesino de la joven ilicitana Trini Agulló, decidió ofrecer su testimonio inculpatorio sobre Tomás B. S., tres años después de que se cometiera el crimen, cuando conoció la violación y muerte de otra joven ilicitana, hace tres meses. La conmoción social que se vivió en Elche en febrero, cuando Geli Pomares fue encontrada muerta con signos de violación en el paraje de El Fondo, actuó como ariete frente a la conciencia del testigo. Una noche, en un bar cercano a la Comisaria de Elche, el delator se encontraba en compañía de varios amigos viendo en la televisión las informaciones sobre el asesinato de Pomares. Al parecer, según fuentes cercanas al caso, "el hombre se derrumbó" y confesó a sus amistades haber presenciado cómo un joven salía del aparcamiento de Trinidad Agulló con las manos ensangrentadas y esgrimiendo un cuchillo. La madrugada de ayer, hace justo tres años, Trinidad Agulló recibió 11 puñaladas en el garaje de su casa. Ayer, siete testigos, entre los que se encontraban tres amigos del supuesto asesino, tres policías y el camarero del bar, declararon en el juzgado número tres de Elche. Tomás B. S. fue detenido el mes pasado, tras la sorpresiva aparición del testigo. Padece desequilibrios mentales y era amigo íntimo del novio de la joven. De momento, la acusación de asesinato sólo se sostiene sobre el testimonio de cargo. Los análisis de un cabello encontrado en el garaje, sobre la que habrá que practicar la prueba del ADN, todavía no han trascendido. Fuentes del caso adelantaron que existen más pruebas que no revelarán, de momento, para que "la defensa no las use en su favor".