Roland Koch, el delfín de Helmut Kohl

Roland Koch, el político de 40 años que ha llevado a la Unión Demócrata Cristiana (CDU) a la victoria en Hesse, en contra del destino y las encuestas, era mucho más que un triunfador anoche. Para sus seguidores -desmoralizados, divididos, inseguros y dubitativos sobre la campaña de recogida de firmas contra la doble nacionalidad-, Koch se había convertido en el delfín de Helmut Kohl. Muchos asocian ya su figura, alta y algo rellena en la cintura, con la del jóven Kohl. Ambos tienen en común el haber logrado metas regionales importantes y su preocupación por los temas sociales.A Koch se le considera como un representante de las nuevas generaciones, pero que además comparte muchos valores de las generaciones más mayores. Hijo de un ministro de Justicia de Hesse, el político ha dedicado toda su vida a los asuntos públicos y fue el jefe de facción más jóven de la CDU. Amante de la buena mesa, como Kohl, Koch, aficionado a la cocina, se ha dedicado a preparar platos en la calle durante la campaña electoral.

Populista inasequible al desaliento, Koch ha repartido propaganda electoral a la entrada de las fábricas y ha sido uno de los primeros en firmar en la campaña de firmas contra la doble nacionalidad. El político afirmaba anoche que la victoria es lo que la CDU necesita para plantearse un relevo de poder en Bonn dentro de cuatro años.