Vergüenza suiza

Puede que nunca haya un verdadero final feliz para la cuestión del "oro nazi", aunque finalmente se haya alcanzado un acuerdo con los bancos suizos. (...) Los que se benefician ahora del acuerdo de Nueva York son "supervivientes" en un doble sentido: del holocausto y del paso del tiempo. No es un acuerdo perfecto, pero (...) es probablemente el más factible.

La acusación de avaricia, como los judíos saben muy bien, es históricamente perniciosa, pero los suizos están demasiado cerca de este negocio para ser calificados así. Hace menos de tres años, sus autoridades admitieron que grandes sumas permanecían en cuentas no reclamadas y el Banco Nacional Suizo reconoció que había ganado millones de francos de las transacciones de oro con los nazis. (...) En junio, los bancos ofrecieron 600 millones de dólares para resolver todas las reclamaciones: sólo han accedido a aumentar hasta 1.250 millones por la amenaza de futuras sanciones. Aun así, una de las condiciones para el acuerdo es apartar del caso al Banco Nacional Suizo, aun que su papel en el proceso del oro nazi no ha sido negado. (...) La tarea más urgente ahora (...) es asegurarse de que el dinero llegue a las víctimas y a sus familias tan rápidamente como sea posible. (...) Como ha dicho el profesor Elie Wiesel, todo el dinero de los bancos suizos no devolverá la vida a ningún niño judío. Pero es tanto un símbolo como una parte esencial de la trágica historia.

14 de agosto.