Fallecen dos marroquíes y resultan heridos sus cuatro hijos

Larbi Chaieb, de 39 años, y su mujer, Malika, de 37 -un matrimonio marroquí con residencia francesa- fallecieron a las 7.30 de la mañana de ayer cuando el vehículo con el que se dirigían a Francia tras pasar las vacaciones en Marruecos atravesó la mediana de la autopista A-7, cerca de La Jonquera, y chocó frontalmente contra un camión que circulaba en sentido contrario. En el vehículo viajaban también los cuatro hijos de la pareja, de entre 5 y 15 años, que resultaron heridos.Los niños fueron ingresados en el hospital comarcal de Figueres, aunque la gravedad de los dos mayores aconsejó su inmediato traslado a centros hospitalarios de Barcelona y Girona. Fátima Chaib, de 15 años, padecía traumatismo craneoencefálico, torácico y abdominal, además de fracturas vertebrales y ruptura renal, y fue trasladada al hospital de Sant Pau, de la capital catalana. Su hermano Moucine, de 12 años, ingresó en el hospital Josep Trueta, de Girona, con traumatismo craneal grave, fracturas, policontusiones y necesitaba ventilación mecánica.

Las hermanas menores, menos graves, permanecieron en el hospital de Figueres. Naima Chaieb, de 5 años, fue operada con éxito ayer por la tarde de una fractura en un fémur. Su hermana Nawal, de 8 años, presenta pronóstico leve, con contusiones frontales y erosiones varias, aunque necesita mayor apoyo psicológico porque es la más consciente de la suerte que han corrido sus padres. Cáritas envió por la tarde al hospital a una cooperante de origen marroquí, que se ha podido comunicar con las dos pequeñas.

El camión contra el que chocó el vehículo de la familia magrebí transportaba material inflamable, aunque en ningún momento existió fuga alguna ni peligro para los vehículos que circulaban por la autopista. El conductor resultó ileso.

Migraciones

Durante la época estival se produce un elevado flujo de vehículos de inmigrantes magrebíes entre Europa y África. A menudo, estos viajes se realizan con vehículos antiguos y cargados en exceso. El peligro de siniestralidad se ve incrementado también a causa de las maratonianas jornadas de conducción de estos trayectos, puesto que es habitual que sólo el cabeza de familia disponga de permiso de conducción y no pueda realizar relevos.Entre el 28 de junio, que se puso en marcha la "operación paso del Estrecho", y el 2 de agosto, cinco magrebíes murieron y otros 20 resultaron heridos en accidentes de tráfico en las carreteras españolas. En ese intervalo, de poco más de un mes, 92.259 vehículos conducidos por inmigrantes han parado en las áreas de descanso habilitadas por la Dirección General de Tráfico.