Los etarras tenían claves para comunicar sus acciones
La dirección de ETA facilitaba a sus comandos una serie de claves para que las utilizaran como forma de autentificar su pertenencia a la organización cuando telefoneasen al diario Egin para reivindicar sus atentados, según declararon a la Ertzaintza los integrantes del comando Lambroa, desarticulado en octubre de 1984.Los activistas del comando manifestaron entonces ante la policía autónoma vasca que en un buzón [posiblemente un agujero] de las proximidades de Umbe (Vizcaya) recibieron una carta de Soledad Iparraguirre Genetxea, Amboto, supuesta responsable de los comandos legales (no fichados). En esa comunicación la presunta dirigente etarra les proporcionaba claves e instrucciones de cómo reivindicar sus atentados a través de llamadas telefónicas a Egin.
Los detenidos declararon a la Ertzaintza que, siguiendo tales instrucciones, se atribuyeron dos acciones: una contra el bar Gurea, de la localidad de Sestao, y otra consistente en la colocación de una bomba de amosal en la línea férrea del tren Sol Levante, a su paso por Tudela.
Los atentados debían reivindicarlos, según las instrucciones supuestamente cursadas por Amboto, mediante dos llamadas: la primera tendrían que efectuarla a la asociación de asistencia DYA y la segunda a Egin. En ésta debían decir que eran miembros de ETA y a continuación una de las claves que figuraba en la lista que les facilitaba la dirección de la organización.
Las claves consistían en una veintena de palabras en euskera, tales como manzana, asco, salsa, camino, etcétera. Según se señalaba en un informe remitido por la Consejería vasca de Interior a la autoridad judicial, en las oficinas del diario había supuestamente una relación similar a la hallada en poder del comando Lambroa, lo que permitía comprobar que quienes llamaban eran realmente miembros de ETA.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Un nuevo asentamiento arraiga en una plaza tras el desalojo del B9: “¿De verdad pensaban que íbamos a desaparecer?"
El Banco de Francia mejora sus previsiones de crecimiento pese a la incertidumbre sobre el presupuesto
TikTok dice que ha firmado acuerdos para crear una nueva empresa conjunta en EE UU
Chenoa y Estopa presentarán las Campanadas de TVE
Lo más visto
- Los hijos de Isak Andic negocian un acuerdo para pagar 27 millones a la pareja del empresario y cerrar el conflicto por el legado
- El Supremo condena a ‘Okdiario’ y a Eduardo Inda por intromisión en el honor de Iglesias al acusarle de cobrar de Venezuela
- Irene Escolar: “Si la gente se droga es porque encuentra en ello una anestesia que necesita. Negarlo es absurdo”
- La asociación mayoritaria de guardias civiles no está de acuerdo con la DGT en sustituir los triángulos por la baliza V16
- “No podemos hacer nada”: la IA permite copiar en exámenes de universidad con una facilidad nunca vista




























































