Ardanza reclama un esfuerzo en favor de "la solidez política" del Parlamento

La de ayer hubiera sido para el lehendakari su última oportunidad de dirigirse a la Cámara de la que ha sido miembro electo durante cuatro legislaturas consecutivas. No pudo hacerlo a causa de la operación de dos hernias de la que se recupera en el Hospital de Santiago en Vitoria y remitió una carta - "desde mi obligada reclusión hospitalaria", señalaba- que el presidente del Parlamento, Joseba Leizaola, leyó al comienzo del pleno. Ardanza recordaba que esa institución le ha elegido lehendakari en cuatro ocasiones y se refería a ello como "un motivo de honor y de orgullo". Ardanza cumplió en enero 13 años de mandato al frente del Ejecutivo, al que accedió en 1985, tras la dimisión de Carlos Garaikoetxea. Además de expresar su pesar por la obligada ausencia de ayer y despedirse de sus compañeros en la Cámara, dejaba expresa en su misiva su reconocimiento y respeto a la institución que, según sus palabras, "simboliza, mejor que ninguna otra, la recuperación de nuestras libertades colectivas y expresa, en su legítima representatividad, la plural voluntad de nuestros ciudadanos y ciudadanas". Ardanza mostró también su agradecimiento a los parlamentarios y partidos que le dieron "la dignidad y la responsabilidad de ser el máximo representante institucional de este país" y le "han mantenido en ellas durante casi catorce años". Respeto a la oposición El lehendakari envió también a la oposición sus respetos, al extender su reconocimiento a quienes "en legítima representación de sus electores, han ejercido lealmente su labor de oposición". "A mí y a mis sucesivos gobiernos", puntualizó. Del mismo modo, Ardanza les pedía disculpas para el caso de que "alguna vez les hubiera ofendido por el uso inadecuado de la libertad de palabra que esta institución a todos nos concede". El lehendakari termina su carta con la recomendación de que la dedicación y comportamiento de los diputados sirvan para dar cada vez mayor solidez política y legitimidad social a la Cámara. "De su correcto funcionamiento depende la salud de esta democracia por la que tanto hemos trabajado y a la que de ninguna manera queremos ni podemos renunciar", señala la misiva. Ardanza evoluciona con normalidad de su intervención, que le mantendrá hospitalizado aún varios días y sometido a rehabilitación después.