Toulouse vive la fiesta en paz

Toulouse no fue Marsella. No hubo esta vez ni cargas policiales -sólo dos, tras el partido, y menos necesariasque disuasorias-, ni carreras, ni el menor rastro de guerrilla urbana. Apenas algunos detenidos y pequeños daños en un bar, que ayer no podía cerrar más tarde de las 23.00 horas. El paso de los hooligans por la capital del Garona fue pacífico y tampoco se preveían incidentes en la madrugada de hoy. Pero no todo fue gratuito: la ciudad se blindó de policías y agentes de paisanos vestidos de turistas, que fotografiaban al mínimo sospechoso Toulouse tuvo tanto pánico que hasta cerró con un perímetro de varios kilómetros los aledaños del estadio.Pancartas del Totenham, del Leeds, del Manchester pendían ayer de la fachada del Ayuntamiento de Toulouse. Cientos de seguidores que lucían los colores de la bandera inglesa acamparon literalmente en la plaza del Capitolio hasta el inicio del encuentro. "¿Por qué hoy es diferente a lo de Marsella? Pues porque los periodistas exageran, la policía es muy dura y los tunecinos, apoyados por los franceses, nos provocaron", explica John While, de 29 años, empleado de las pompas fúnebres en Stok Port, de vacaciones en Francia siguiendo a su selección. Echa pestes sobre la organización y la falta de entradas. "A nadie en este país le interesaba el partido y las entradas están agotadas", dijo. Antes del duelo, más de 5.000 seguidores no tenían localidades y tampoco estaba previsto instalar una pantalla gigante. No hacía falta: un policía confesó que todos entraron. Las compraron en la reventa.